La obra pública licitada por las distintas administraciones sumó un monto inversor de 18.545,34 millones de euros durante el pasado año, el 11,8% más que en el ejercicio precedente, según datos de la patronal de constructoras y concesionarias Seopan. La promoción de proyectos públicos encadena así tres ejercicios consecutivos de crecimiento y alcanza su importe máximo de la última década, en concreto, desde 2010, cuando ya en plena crisis, pero aún en vísperas de los recortes de 2011, se lanzaron obras por 26.209 millones. La licitación logra estas cotas a pesar de la situación de interinidad que tuvo durante gran parte del año el Gobierno central, que además tampoco contó con Presupuestos para 2019, y de los procesos electorales autonómicas y locales celebrados en mayo.