Organizaciones empresariales y de trabajadores destacaron ayer la importancia del "escudo económico-social" anunciado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para protegerse de los efectos del coronavirus, aunque ven algunos agujeros y les gustaría que tuviera más grosor, sobre todo en lo que se refiere a los trabajadores autónomos y a los más vulnerables.

El presidente de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), Belarmino Feito, destacó "la importante batería de medidas económicas, especialmente avales públicos, y también laborales" incluidas en el Real Decreto Ley que se aprobará hoy. "Tenemos que analizarlas en profundidad antes de pronunciarnos, porque desconocemos aún los contenidos específicos, más allá de lo anunciado por el Presidente", apuntó Feito, que espera que se concreten en la línea de lo planteado en países como Alemania e Italia. "Creo, como también dice la CEOE, que estas medidas van a ser útiles para que el crédito pueda seguir llegando hasta las empresas y que van a ayudar a preservar el empleo", afirmó el presidente de la FADE, organización que también ve bien la agilización de los ERTE y la suspensión de cotización, en esos casos, por parte de las empresas.

Feito insistió en que no conoce aún el detalle de las medidas del Ejecutivo de Pedro Sánchez, aunque espera que irán en línea con lo acordado entre Gobierno, CEOE y sindicatos. No obstante, apuntó que "si de la lectura de los titulares echo algo en falta es un mayor apoyo a los autónomos, los grandes perjudicados de esta crisis y los más necesitados de apoyo. Poca ayuda para un colectivo tan castigado", afirmó Feito.

La presidenta de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) en Asturias, Patricia Oreña, se sintió ayer "un poco decepcionada" tras escuchar a Pedro Sánchez. "He echado de menos mayor contundencia, que el Presidente dijera claramente que los autónomos que no tienen ingresos por el estado de alarma no pagarán cotizaciones a la Seguridad Social, pero no lo ha hecho", afirmó Oreña, que añadió que los autónomos ya cotizaban para tener acceso a la prestación por cese de actividad. "El Gobierno siempre defendía que había que igualar las cotizaciones a los ingresos y ahora con el estado de alarma nuestros ingresos son cero", añadió Patricia Oreña.

La asociación de hostelería y turismo de Asturias, OTEA, de la que forman parte un importante número de autónomos, señaló ayer que "hay muchos aspectos" que en la comparecencia del presidente del Gobierno "no se expusieron, generando incertidumbre". Además, esta organización del sector turístico señaló que espera que otras administraciones a nivel regional y local "acuerden medidas en su ámbito de actuación que nos ayuden a superar este momento".

Desde la patronal del sector asturiano del metal, Femetal, están a la espera a conocer el contenido del real decreto para posicionarse. "Necesitamos conocer las condiciones operativas de los avales públicos para comprobar que son las necesarias para las empresas del sector y equivalentes a las anunciadas en Francia e Italia", apuntaron fuentes de la patronal del metal presidida por Guillermo Ulacia, que no obstante añadieron que Femetal "valora positivamente el compromiso de reducción de plazos en la tramitación de los ERTE e insistimos que se habiliten los recursos para que se puedan gestionar rápidamente".

El presidente de la Cámara de Comercio de Gijón, Félix Baragaño, señaló que la organización "valora y apoya las medias económicas planteadas por el Gobierno, especialmente aquellas destinadas a asegurar la liquidez de las empresas, fundamental para garantizar su viabilidad y proteger al máximo los puestos de trabajo". Además, Baragaño consideró "de vital importancia las medidas destinadas a facilitar los ajustes temporales de plantilla para evitar los despidos y facilitar el mantenimiento del empleo", y añadió que desde la Cámara "aplaudimos la reforma de la normativa de inversiones para salvaguardar a las empresas asturianas frente a posibles operaciones derivadas de la volatilidad de los mercados".

El secretario general de UGT de Asturias, Javier Fernández Lanero, señaló que, a falta de leer "la letra pequeña" del real decreto, las medidas "son muy positivas" y en ellas están "el grueso de nuestras peticiones". Fernández Lanero resaltó "la ayuda a los trabajadores para que puedan llegar a acuerdos para reducir jornada, conciliar y teletrabajar"; la "agilización" de los ERTE con un reconocimiento de las prestación por desempleo sin periodos mínimos de cotización y que ese tiempo consumido de paro no compute, o el "apoyo " a los autónomos. Además incidió en las ayudas "a las familias más vulnerables" para que no les falte agua, luz y gas y la suspensión de los desahucios. "Puestos a pedir algo más sí se podría haber complementado hasta el 100% el salario de los trabajadores afectados por un ERTE y esperamos que las ayudas a las empresas estén condicionadas a que no se despidan a trabajadores", afirmó Javier Fernández Lanero.

El secretario general de CC OO en Asturias, José Manuel Zapico, apuntó que las medidas anunciadas por el Gobierno "son un primer paso para que la gente no se quede sin trabajo, pero nos preocupa también los que ya no lo tienen, esos 35.000 parados que hay en Asturias sin prestaciones y que ahora estén en una situación aún más vulnerable".

Zapico destacó que en la gran recesión "se rescató a los bancos y ahora es necesario que se rescate a las familias más vulnerables". Apuntó que la movilización de 200.000 millones de euros anunciada por Pedro Sánchez supone "un gran esfuerzo", pero lo calificó de "insuficiente" y añadió que países como Alemania han elevado su paquete de ayudas hasta los 500.000 millones de euros. "Hay que destinar todos los recursos púbicos posibles para evitar que, a causa del coronavirus, se produzca ahora un peste negra laboral". Aunque valoró "positivamente" las medidas del Gobierno, echó en falta otras más contundentes y destacó que en Italia "se ha prohibido el despido y es una medida que aquí es necesaria".