Alemania, la mayor potencia europea, entró técnicamente en recesión entre enero y marzo tras sumar dos trimestres consecutivos en retroceso, con lo que las tres mayores economías de la UE (el país germano, Francia e Italia) están ya en fase recesiva. España, la cuarta mayor economía, se libra por el momento aunque, junto con Francia e Italia, son los tres países que mayor decrecimiento experimentaron en el primer trimestre (entre más del doble y casi el triple que Alemania) a causa de la pandemia y los confinamientos desde mediados de marzo, lo que les penaliza de manera más intensa por su alta dependencia del sector turístico.

Según avanzó ayer Eurostat (la oficina estadística europea), la UE y la eurozona sufrieron las mayores caídas trimestrales desde que existe la serie estadística (que se remonta a 1995, hace un cuarto de siglo) y los más intensos en tasa interanual desde 2009, en plena crisis financiera internacional.

La UE (27 países) decreció el 3,3% respecto al trimestre precedente y el área monetaria del euro (19 naciones) se replegó el 3,8%, aun cuando la pandemia y el confinamiento no empezó a impactar hasta finales de febrero en Italia y comienzos de marzo en el resto.

En comparación con el mismo trimestre de 2019, el PIB desestacionalizado disminuyó el 2,6% en la UE y el 3,2% en la eurozona.

De los datos avanzados, destaca la entrada en recesión de Alemania, que es la mayor economía del área, y el fuerte castigo de los tres mayores países del sur. Alemania, que ya había retrocedido el 0,1% en el cuarto trimestre, se dejó entre enero y marzo el 2,2%.

Las caídas más intensas las han sufrido Francia (-5,8%), España (-5,2%) e Italia (-4,7%), junto con Eslovaquia (-5,4%). Sus desplomes han sido entre más del doble y casi el triple que el descenso alemán (-2,2%). Esto obedece a que los tres mayores países latinos son también los mayores destinos turísticos del área. Eurostat no ofreció datos de otros países menores pero también muy turísticos como Grecia. Otros dos países muy penalizados por la pandemia fueron Portugal y Bélgica, con descensos en ambos casos del 3,9%

El Fondo Monetario Internacional (FMI), el Instituto de Finanzas Internacionales (IFF), la Comisión Europea, la Organización Mundial de Turismo (OMT), Deutsche Bank (que lo reiteró ayer), JP Morgan, Société Générale, ING, Moody's, S&P y otros analistas ya habían avisado del altísimo impacto de la pandemia en los países más dependientes de los flujos turísticos.

El retroceso alemán entre enero y marzo, aunque un tercio menor que el promedio de la eurozona, es el mayor que sufre el país desde 2008-2009 (durante el estallido de la crisis anterior), y el segundo más intenso desde el que se produjo en 1990 tras la reunificación alemana.

La única noticia esperanzadora llegó de China. El gigante asiático y origen de la pandemia, experimentó un crecimiento de su producción industrial en abril del 3,9% en tasa interanual, aunque es 1,5 puntos inferior a la del mismo mes de 2019. La de EEUU sufrió su mayor caída en 100 años.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, volvió a comprometerse a un presupuesto que doble la actual dotación. A su vez, los embajadores de los 27 pactaron el fondo SURE para financiar ERTES con créditos muy blandos. España lo solicitará, dijo la ministra Calviño.