Los comerciantes asturianos quieren hacer rebajas, pero no ahora. Dentro de unas semanas. Con la apertura gradual de los comercios, el Gobierno, tras un montón de dudas y de mensajes contradictorios, permite que desde ayer los comerciantes que quieran puedan hacer descuentos y que así los pequeños puedan sacar algo de provecho antes de que las grandes superficies vuelvan a abrir en masa. Pero muy pocos colgaron ayer el cartel de rebajas en sus escaparates. Primero hay que recuperarse del golpe, dicen.
"Ya que no hemos tenido temporada, lo que queremos es que las rebajas sean un remate final", señala la secretaria general de la Federación de Comercio de Asturias, Magdalena Huelga. Que asegura que ahora no es el momento de poner descuentos, aunque el Gobierno haya abierto la veda. La presidenta de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) en Asturias, Patricia Oreña, señala tajante que "no hay ambiente de rebajas en la región".
Aunque, los descuentos van por barrios en Asturias. Por ejemplo, en Avilés, el presidente de la Unión de Comerciantes (UCAYC), José Antonio Álvarez, señaló que "lo que pedimos los minoristas es que se termine con la desregularización aprobada hace ocho años y volver a la normativa anterior a 2012 que marcaba el periodo de rebajas de invierno y verano".
Mientras que en las Cuencas los comerciantes eran algo más optimistas. El presidente de la Asociación de Comerciantes e Industriales del Valle del Nalón (Acoivan), Marcelino Tamargo, aseguró que "es algo bueno el que hayan dado marcha atrás es un tema tan importante, en este momento hay que hacer caja". Los asociados de la Unión de Comerciantes del Caudal, que preside Loli Olavarrieta, están algo más divididos. En su mayoría, como destacó Olavarrieta, "quieren hacer promociones, no una rebaja rebaja".
