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Las dificultades del sector secundario

La industria alerta del bloqueo de los sistemas para bajar el precio de la luz

La patronal que agrupa a Arcelor y a Azsa reclama al Ejecutivo que copie las medidas de Italia para favorecer la reactivación

La industria alerta del bloqueo de los sistemas para bajar el precio de la luz

La Asociación de Empresas con Gran Consumo de Energía (Aege), patronal a la que pertenecen grupos de gran relevancia en Asturias como ArcelorMittal y Asturiana de Zinc (Azsa), instó ayer al Gobierno central a convocar con premura una nueva subasta eléctrica que permita abaratar el precio de la luz industrial y ayudar con ello a la reactivación económica. Las compañías alertan de que, al contrario que otros países europeos competidores, en España están por ahora parados dos mecanismos que permiten aligerar los costes energéticos: las referidas subastas de interrumpibilidad y el llamado estatuto del consumidor electrointensivo, cuya tramitación quedó suspendida a raíz de la crisis sanitaria del covid-19.

"Es muy preocupante que mayo termine y que los electrointensivos españoles sigamos sin noticias de cuándo y cómo será la subasta para el segundo semestre. Sin medidas que potencien la industria se hará más difícil la reactivación, y una de ellas es el servicio de interrumpibilidad", explicaron a este diario fuentes de Aege.

En ausencia del estatuto electrointensivo, la gran industria con procesos que requieren grandes consumos de luz (fabricación de acero, cinc, aluminio, cemento...) ve imprescindible que el Gobierno mantenga el servicio de interrumpibilidad, en revisión en todos los países por orden de la Unión Europea. "El reglamento europeo del mercado eléctrico establece que la interrumpibilidad es un instrumento que deberá evolucionar hacia un esquema coherente con los mecanismos de capacidad. Pero mientras llega dicho desarrollo normativo es esencial mantener el servicio actual y potenciarlo como instrumento para que la gran industria básica electrointensiva pueda reactivar nuestra economía en estos críticos momentos", argumenta Aege.

El sector destaca además cómo, en el contexto de la crisis del coronavirus, Alemania, Francia e Italia han aparcado la referida reforma de la interrumpibilidad, manteniendo asignaciones significativas de potencia para sus fábricas en 2020: 1.500 megavatios en los casos alemán y francés y hasta 4.000 en el italiano. "La potencia interrumpible de Italia se reforzó a finales del pasado mes de abril con una nueva subasta para reactivar la actividad industrial del país tras la dura crisis del covid", señala el lobby electrointensivo español.

La industria considera además que en España hay razones de política energética que justifican mantener por ahora el servicio interrumpible, procedimiento mediante el cual las empresas obtienen una retribución -a la postre, un ahorro en la factura eléctrica- a cambio de estar disponibles para desconectarse y suspender sus consumos cuando se requiera para garantizar la seguridad de suministro a otros usuarios o para favorecer una moderación de los precios en el mercado eléctrico. Aege recuerda que, al contrario que Francia y Alemania, la capacidad de interconexión eléctrica con otros países es muy limitada en España.

Al hilo de la actual crisis y de la necesidad de estimular la actividad industrial, el sector emplaza al Gobierno a activar una subasta de 2.000 megavatios interrumpibles para la segunda mitad del año, el doble que para el primer semestre, y en condiciones técnicas y económicas que eviten el fracaso del último procedimiento, que redujo el 95% la retribución a las empresas y dejó sin ninguna a las grandes fábricas asturianas.

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