Capsa, la principal sociedad fabril y generadora de negocio del grupo Central Lechera Asturiana (Clas), ganó el año pasado 23,12 millones, el 1,3% más que en el ejercicio precedente.
Este resultado (el mejor en términos nominales -sin contabilizar la inflación- desde 2003) supone el séptimo aumento consecutivo del beneficio de la compañía desde que incurriera en pérdidas en 2012.
La mejora del resultado se produjo pese a un retroceso de la facturación (el primero desde 2016), lo que la compañía atribuyó al desplome que sufrieron en 2019 los precios de la materia grasa en los mercados internacionales (la media ponderada del ejercicio fue de 4,344 euros por kilo frente a 5,538 euros en 2018), lo que dañó el volumen de ingresos del negocio de ingredientes de base láctea para la industria alimentaria. La compañía ya había dicho entonces que estaba intentando aliviar el impacto priorizando el resto de líneas de producto. El impacto negativo se vio a su vez compensado por mejoras de eficiencia operativa. Con ello, la sociedad logró mejorar el beneficio el 1,3% aunque el volumen de negocio se redujo el 2,34%, hasta los 720,8 millones.
Pese a esta merma del valor de las ventas, el volumen de ingresos de Corporación Alimentaria Peñasanta (Capsa) fue el segundo más alto desde 2010 y sólo inferior a los 737,69 millones de 2018.
Con el ejercicio de 2019, Capsa culminó la ejecución de su plan estratégico para el periodo 2015-2019. En ese periodo la compañía aportó a su principal accionista (la sociedad de ganaderos Clas) 160 millones de euros, lo que incluye los dividendos por beneficios generados, las primas que Capsa abona los socios de su matriz en el precio de compra de leche y el canon a Clas por cesión de uso de la marca Central Lechera Asturiana, la más importante de las que comercializa Capsa en los mercados nacional e internacional.
Capsa superó el año pasad el 7% de crecimiento en los mercados de leche, nata, mantequilla y quesos.
Según datos de la consultora Nielsen, difundidos ayer por Capsa, el grupo lácteo asturiano culminó 2019 con una cuota de mercado en España del 17,9% en leche, el 19,8% en nata y el 24,2% en mantequilla. En el canal de hostelería sus ventas aumentaron el 7% y sus productos tienen presencia en el 30% de los establecimientos.
En el caso del mercado internacional, en el que Capsa empezó a introducirse en 2013 (aunque había habido alguna incursión previa desde 1986), las exportaciones de la sociedad crecieron en el pasado ejercicio casi el 60%, y, sin contar la UE (que se considera mercado interior), las ventas de leche en el exterior por Capsa suman ya el 36,8% de la leche líquida envasada que se exporta desde España a países extracomunitarios (en 2018 había sido el 20,3%) y, en el caso de la nata líquida representó el 12,3%, cuando un año antes había supuesto el 9%.
El volumen de leche recogida y tratada en el último ejercicio alcanzó los 928 millones de litros, frente a los 928,5 millones de un año antes, que había sido una cifra récord en la historia del grupo.
En 2019 se intensificó la estrategia iniciada un año antes con el lanzamiento desde entonces de siete iniciativas sucesivas en los ámbitos de la investigación científica en torno a la salud, la alimentación personalizada, el microbioma, la genómica, la medicina preventiva, la industria farmacéutica y la transformación de residuos, en lo que pretende ser el comienzo de una nueva etapa en la historia del grupo, que, fundado en 1967, aspira a ser más que un grupo lácteo y erigirse en un actor en la mejora de la salud y la nutrición.
Capsa, presidida por Bertino Velasco (presidente de Clas) y dirigida por José Armando Tellado, tiene implantación fabril en cinco comunidades autónomas, es líder nacional y está participada por Central Lechera Asturiana (81,39%), Liberbank (10,90%) y Caja Rural de Asturias (7% ).
