La tibia mejora del empleo que registró Asturias durante el mes de mayo -el primero de la desescalada poscoronavirus- se produjo, sobre todo, a las orillas del bravo Cantábrico y en los concejos cuya actividad está más orientada al turismo que se espera que vuelva a entrar en masa cuando se levanten todas las restricciones de movilidad derivadas de la pandemia sanitaria. Según reflejan los datos que acaba de divulgar el Servicio Público de Empleo, el Principado camina a diferentes velocidades en lo que se refiere a la recuperación del empleo y a la mejora laboral durante estas primeras semanas de la desescalada. El paro continúa subiendo, con poca intensidad, eso sí, en los dos principales municipios de la región, Oviedo y Gijón. Pero ya baja en concejos claves para el mercado turístico como Llanes o Ribadesella.
Por la costa oriental es, precisamente, donde más se atisba la mejoría. De hecho, Llanes fue el municipio asturiano en el que más cayó el desempleo de un mes para otro. En concreto, 56 personas abandonaron las listas de la oficina desempleo llanisca. Muy de cerca, casi a la zaga, le sigue el municipio vecino de Ribadesella, en donde se registraron 16 parados menos. Se da la circunstancia que la mayoría de los municipios del Oriente sufrieron descensos en el número de desocupados. Y no solo los bañados por el Cantábrico. En algunos concejos turísticos del interior, como Cangas de Onís, el desempleo también está comenzando a reducirse.
Pero la desescalada va por barrios. O, mejor dicho, por concejos. En la costa del occidente regional la situación fue algo más desigual, no tan homogénea como en el Oriente. Hubo bajadas importantes del paro en Vegadeo y en la industrializada Navia. Y también hubo municipios en los que la mejoría del mercado laboral aún no se ve, como fue el caso Tapia. Eso sí, las subidas del paro, donde las hubo, fueron más bien tímidas.
Peores resultados se dieron en los dos grandes concejos de Asturias, donde la desescalada parece que está teniendo unos efectos aún bastante limitados sobre la evolución del empleo. Oviedo sumó de un mes para otro a la lista 104 desempleados y Gijón añadió 96. Mientras que Avilés agregó solamente 14. Por su parte, Siero fue el único de entre los grandes que da síntomas de mejoría tras la parálisis por culpa del coronavirus En total, contabilizó 13 demandantes menos de empleo.
En las Cuencas también hubo cierto respiro laboral. Mieres lideró esta desescalada del paro en las comarcas mineras. El número de demandantes de empleo bajó en 17 en ese concejo. Subió en solo una persona en Langreo. Mientras que Aller sacó a 14 personas de las listas de demandantes de empleo.
