La exministra de Sanidad y actual responsable de ese área en el PSOE, la asturiana María Luisa Carcedo, aseguró ayer en Soria que el ingreso mínimo vital (IMV) "beneficia a la sociedad en su conjunto" ya que es una medida económica "de primera magnitud y no solo social", que supone "redistribuir riqueza y colocar renta en los hogares que lo van a gastar, van a dinamizar el comercio y a satisfacer sus necesidades más básicas, por lo que todo va a ir a inversión".

Carcedo incidió en que con el ingreso mínimo vital se sitúan "recursos económicos en las personas que están en situación de pobreza severa", para sacarlas de "esa situación de precariedad". "Es una medida de enorme capacidad de redistribución, pero también de justicia social básica, es un derecho de ciudadanía, además de la medida más eficaz para luchar contra la pobreza infantil", remarcó.

La exministra también indico que con el IMV se darán recursos económicos a cerca de 850.000 hogares españoles. Las ayudas podrán solicitarse a partir del 15 de junio, aunque los beneficiarios lo recibirán con carácter retroactivo desde el día 1 de este mes.

El impacto del IMV

La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha revisado en dos décimas su previsión de déficit para este año, elevándolo hasta el 14 por ciento del PIB en el peor de los escenarios posibles, por la puesta en marcha del nuevo ingreso mínimo vital aprobado por el Gobierno y un mayor gasto sanitario del previsto.

Si bien en el caso del ingreso mínimo la AIReF no dispone de información necesaria para su evaluación, tal y como explicó en el Congreso su presidenta, Cristina Herrero, el organismo ha incorporado las previsiones de gasto del Ejecutivo a las previsiones con las que contaba. Herrero censuró que el último cuadro macroeconómico del Gobierno, incluido en la actualización del Programa de Estabilidad, no se recogiera el impacto del ingreso mínimo vital.