Javier García Laza, adjunto al consejero delegado de Duro Felguera, y Alfonso Gordon, director de recursos humanos, fueron destituidos ayer y despedidos por la compañía. La empresa lo atribuyó a "pérdida de confianza" en el primer caso y a la voluntad de amortizar el puesto de adjunto al primer ejecutivo para reducir costes de estructura, en el segundo.

El comité laboral -que ayer pidió la dimisión al consejero delegado, José María Orihuela- ha vinculado las destituciones a una represalia por ser directivos "discrepantes" con la gestión. Cinco de los ocho miembros del comité de dirección -incluidos García Laza y Gordon- habían expresado el lunes por carta al consejo de administración su queja por el proceder del primer ejecutivo.

El malestar interno y las discrepancias se acrecentaron, según el comité laboral, a raíz de que el consejero delegado hubiese ordenado la realización de copias del contenido de los ordenadores y teléfonos de trabajo del equipo de dirección. Fuentes de la empresa alegaron que se trata de la realización de un informe "forensic" que ya se hizo el año pasado sin que entonces produjera rechazo.

El comité laboral también denunció los hechos al consejo y reprochó que no se hayan seguido "procedimientos legales" y "con las debidas garantías". El comité afeó al consejo que "se ponga de lado" ante lo que juzga como un "atropello" y comportamientos "despóticos", y denunció el "perjuicio" de la gestión, con "contratos resueltos, pleitos con los clientes más importantes, conflictos con proveedores y socios, falta de contratos, avales e inversores, y nulas negociaciones con la banca" y "en medio de un ERTE y una caja menguante".

CC.OO de Industria señaló la existencia de una "guerra abierta" entre "la mayoría del comité de dirección" y el "consejero delegado y su consejo de administración" en "desacuerdo con las decisiones que se están tomando" y reclamó que "se deje de cerrar las puertas" a posibles inversores. Considera que se pueden estar anteponiendo intereses particulares.

García Laza se incorporó a Duro en 2015 como director general de Energía. En diciembre de 2018, tras la llegada de Orihuela, pasó a ser director técnico corporativo y, en 2019, adjunto al consejero delegado. Gordon se sumó a Duro como director de recursos humanos en marzo de 2019. La dirección y el consejo de Duro han sufrido sucesivas remodelaciones en los últimos años.

La compañía anunció que "está valorando la posibilidad de solicitar acogerse a las medidas de apoyo a empresas estratégicas que ha puesto en marcha el Gobierno", el llamado "fondo de rescate" por la Covid. El grupo analiza las opciones para ello.