ACS ganó 361 millones en los primeros seis meses del año, lo que supone un descenso del 30,9% respecto al mismo periodo del año anterior, lastrada por la "drástica caída" en el tráfico medio diario en las autopistas de Abertis como consecuencia del confinamiento. La paralización de la actividad también provocó una reducción "significativa" en las tareas de limpieza y mantenimiento durante el estado de alarma, la principal actividad de su filial Clece.