El Gobierno y los agentes sociales abrirán mañana, viernes, las negociaciones sobre una nueva prórroga de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), mecanismo que ha permitido en estos meses contener la destrucción de empleo y la desaparición de empresas mediante una multimillonaria inyección de dinero en prestaciones extraordinarias para los trabajadores afectados y en bonificaciones en los pagos de las empresas a la Seguridad Social. Ante el inicio de ese diálogo, la patronal asturiana y los sindicatos han hecho un llamamiento a concertar la prórroga de los ERTE en condiciones que favorezcan a estabilidad del empleo y de las empresas.

"La intensidad de esta crisis sanitaria y sus efectos (...) obligan, no solo a mantener en el tiempo las medidas ya adoptadas, sino a intensificarlas", subrayó Marta Álvarez, responsable del servicio de estudios de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE). Y añadió: "Insistimos particularmente en la necesidad de extender la duración de los ERTE más allá de septiembre, evitando con ello consecuencias graves y duraderas sobre el empleo".

UGT expresó así esa misma inquietud: "En septiembre finaliza la prórroga de los ERTE, lo que puede provocar una fuerte destrucción de empleo; por ello es necesario alcanzar acuerdos para preservar el empleo y la actividad productiva".

Úrsula Szalata, responsable de empleo de CC OO, puso el acento en la necesidad de desplegar políticas que ayuden a la inserción laboral de los parados: "Necesitamos cada euro (del dinero de las llamadas políticas activas de empleo) para las personas vulnerables".

Juanjo Estrada, coordinador de USO en Asturias, pidió a los gobiernos "un esfuerzo para un otoño decisivo que pasa por trabajar a marchas forzadas en cimentar un tejido tecnológico-industrial estable".