La dirección de ArcelorMittal pretende reducir temporalmente 15 empleos en las nuevas baterías de cock de Gijón. Esta medida está vinculada a la próxima reapertura del horno alto "A" tras seis meses de paralización y no al ajuste de costes en la división de largos, que supondrá por ahora el recorte de 44 puestos de trabajo con carácter definitivo en la acería de Gijón y en el tren de alambrón.

El planteamiento de la multinacional siderúrgica para las baterías de Gijón supone eliminar tres puestos de trabajo por turno en operador de calentamiento, ayudantes de baterías y operador de subproductos. La medida se prolongará hasta que entre en fase de calentamiento la segunda fase de las baterías, cuya construcción y encendido podría terminar en febrero, aunque no hay plazos oficiales. A partir de ahí, el calentamiento duraría otros seis meses, con lo que el ajuste se podría prolongar hasta noviembre de 2021.