Unicaja Banco y Liberbank han decidido darse una nueva oportunidad y volver a intentar unir sus fuerzas para ser más grandes y sobrevivir mejor en un sector financiero cada vez más complicado y menos rentable, en el que la crisis económica y los bajos ingresos han reactivado las fusiones.

Ambas entidades han confirmado a la CNMV este lunes eso contactos preliminares, tras los rumores que han inundado el mercado en las últimas semanas, desde que CaixaBank y Bankia anunciaron su fusión a principios de septiembre, aunque han dejado claro que aún no hay nada concreto sobre la mesa.

(Lee aquí el reportaje "Unicaja, un banco andaluz con capital asturiano")

Pese a ello, los inversores se han mostrado entusiasmados por la posibilidad de que esta vez fructifiquen las negociaciones entre Unicaja Banco y Liberbank, con lo que las acciones de Liberbank han llegado a subir hasta el 20 % y las de Unicaja Banco, hasta el 15 %, si bien luego han perdido algo de fuelle.

El resto del sector bancario cotizado también se ha revalorizado al calor de esta posible nueva oleada de fusiones, especialmente el Banco Sabadell, que aparece en todas las quinielas, y ha llegado a subir más del 4 %.

Intentos frustrados

Unicaja Banco y Liberbank han intentado fusionarse en otras ocasiones, y la última fracasó en mayo de 2019 después de cinco meses de negociaciones, ante la falta de acuerdo entre ambas sobre su valor y el consiguiente reparto accionarial.

Este reparto, que en un primer momento pudo llegar a ser del 60-40 a favor de Unicaja Banco, podría reducirse ahora hasta el 57,5 %-42,5 %, según fuentes del sector consultadas por Efe.

Los dos grupos formados por antiguas cajas de ahorros crearían la quinta entidad por activos del mercado español, en torno a 100.000 millones de euros, por detrás de Sabadell, aunque habrá que esperar a que se sienten a negociar y contraten asesores, algo que aún no han hecho.

Aunque haya quien pueda pensar que en esta ocasión lo avanzado de las negociaciones anteriores les ahorrará tiempo, lo cierto es que las cifras que se manejaron entonces no serán las mismas tras el tsunami que ha causado la pandemia del coronavirus en el sector.

Banco Sabadell vuelve a las quinielas

La fusión de CaixaBank y Bankia y las conversaciones de Unicaja Banco y Liberbank no son las únicas que se están dando en el sector, donde hoy ha vuelto a cobrar protagonismo el Sabadell, que está de nuevo en todas las quinielas y ha sondeado al BBVA y a Kutxabank sobre una fusión, según fuentes financieras.

A pesar de estos contactos, Sabadell aclara que no mantiene conversaciones formales con nadie e insiste en que tiene su propia hoja de ruta para ganar rentabilidad y crear valor en solitario, sin descartar "cualquier opción estratégica" que cree y maximice el valor para los accionistas.

Santander y BBVA

Los dos grandes bancos parecen, a priori, los mejor posicionados para hacerse con el Sabadell, sin embargo las cúpulas de ambas entidades han insistido públicamente en que la prioridad es el crecimiento basado en su propio negocio.

El negocio de pymes del Sabadell, unido a su presencia en Cataluña, encaja bien con Santander, además de que podría encontrar sinergias uniendo sus filiales en Reino Unido, pero no parece ser la mejor opción porque el gigante presidido por Ana Botín, tras la compra de Popular, tiene ya una importante cuota en España.

En el caso de BBVA, la situación es distinta porque aunque el banco también ha enfriado la posibilidad de llevar a cabo más compras en España, su última operación corporativa fue la adquisición hace años de CatalunyaCaixa y la presión de los reguladores podría ser mayor que con Santander.

Desde principios de septiembre, siempre según las fuentes financieras consultadas por Efe, BBVA tiene un equipo propio haciendo números por su cuenta sobre una fusión con Sabadell; desde la entidad no confirman este hecho, pero recuerdan que por obligación con sus accionistas el banco debe estudiar todas las oportunidades que surjan.