Javier CUARTAS
El consejero de Industria afirma que los interesados han hecho acercamientos de “forma más seria y privada” que Blas Herrero
Blas Herrero “no es la única opción” de un inversor privado para Duro Felguera. “Hay otros que tienen interés en mantener las conversaciones de una forma más seria y privada, que es como se suelen hacer estas actividades en el mundo empresarial”, afirmó ayer en el parlamento autonómico el consejero de Industria, Enrique Fernández, tras se preguntado por la oferta del empresario sierense. Duro, en situación de gran dificultad económica y en espera de un posible rescate por el Estado, ha convocado a los sindicatos para negociar un nuevo expediente de regulación temporal de empleo (ERTE). Las conversaciones comenzarán previsiblemente la semana próxima. El titular de Industria sostuvo que la salvación de Duro puede pasar por varias fórmulas: bien la entrada en su capital de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) o una solución de colaboración público-privada, en la que a las instituciones públicas se sumen uno o varios inversores privados, y “no necesariamente”, dijo, “el único que por las razones que él sepa se ha dado a conocer”, dijo en referencia implícita a Blas Herrero.
Según el consejero, desde que se contrató en agosto de 2019 a un asesor externo para buscar capital privado se han mantenido contactos con más de 40 compañías y fondos de inversión de perfil industrial que pudieran estar potencialmente interesados. Los contactos, bajo seguimiento del Principado, fueron traslados a la compañía, que ha desarrollado, dijo Fernández, los contactos pertinentes y “se han producido distintos grados de avance”. El consejero delegado de Duro, José María Orihuela, ya había avanzado el 28 de octubre en declaraciones a este diario que la empresa había detectado últimamente muestras de interés crecientes aunque aún muy preliminares.
Según desveló Fernández, cuando el Principado anunció en agosto de 2019 su colaboración en la búsqueda de inversores, Duro Felguera estaba resuelta a solicitar el concurso de acreedores, que se hubiese decidido “probablemente” en el consejo de administración que estaba convocado para el día siguiente. La implicación del Principado en la búsqueda de socios paralizó, según Fernández, la decisión.
La dirección de Duro ya ha convocado a los sindicatos para negociar un nuevo expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) por causas productivas motivadas por la pandemia. El ERTE afectará a un colectivo laboral similar al que ya estuvo vigente entre el abril y octubre y que hasta el 30 de junio había supuesto un ahorro de 1,8 millones, según la empresa. El ERTE afectará a la sociedad matriz (Duro Felguera) y a las filiales Felguera IHI, DFOM y Mompresa, pero no a Felguera Calderería Pesada y Epicom. El anterior ERTE (que la compañía pretendía prorrogar, a lo que se negó la representación laboral) se planteó para 672 de los 1.187 trabajadores del grupo con un límite máximo de 465 al mes. La afectación media mensual fue de 214 empleados regulados. La compañía no desveló la condiciones que ofrecerá a la plantilla para el nuevo ERTE.
