Las empresas asturianas de capital familiar expresaron ayer al Gobierno del Principado su inquietud por las enmiendas planteadas por Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) al presupuesto para modificar el impuesto de sucesiones y el acuerdo alcanzado para crear una comisión de estudio y negociación de una posible armonización tributaria en el ámbito autonómico para impedir la competencia fiscal.
La Asociación de la Empresa Familiar de Asturias (AEFAS) planteó ayer al vicepresidente del Gobierno del Principado, Juan Cofiño, la inquietud por algunas propuestas de ERC que, de prosperar, supondrían elevar el mínimo de capital tanto individual como de los grupos familiares a partir del cual podrían acogerse los beneficiarios a las exenciones de ámbito estatal. AEFAS (representada por su presidente, Jorge Suárez; su tesorero, Íñigo Cabal, y su directora, Julia López) alertó de que empresas familiares asturianas que están en la tercera y cuarta generaciones podrían quedar excluidas en ese supuesto, lo que abocaría a los herederos de esos grupos a afrontar pagos tributarios por importes superiores a su capacidad de recursos líquidos para afrontarlos. “Sería una estocada tremenda para la empresa familiar”, alertó Jorge Suárez.
“Sería una estocada tremenda para la empresa familiar”
AEFAS se ofreció al Gobierno asturiano para asesorarle sobre distintos supuestos que podrían darse si finalmente se abre la negociación.
La asociación asturiana de las empresas familiares planteó a su vez su aspiración a participar en el comité asesor creado por el Principado para el estudio y seguimiento de los fondos europeos ligados al plan de reconstrucción y en el que participan la patronal FADE, los sindicatos UGT y CC OO, la Universidad de Oviedo y la Federación Asturiana de Concejos (FACC). Según AEFAS, Cofiño habría considerado que esta asociación familiar podría en su caso participar en alguno de los equipos de trabajo que se creen para no ampliar un comité, que se pretende que sea reducido para dotarlo de la mayor agilidad posible.
AEFAS también propuso al vicepresidente del ejecutivo autonómico un proyecto que acaricia desde hace tiempo la asociación empresarial para crear una plataforma abierta a la que reporten información ciudadanos y empresas sobre la eficacia y rapidez en sus relaciones con la Administración autonómica y que permita evaluar su diligencia por departamentos, áreas y consejerías y disponer de una métrica y “ranking” de capacidad resolutiva.
