La mayoría de accionistas de Caixabank votaron ayer a favor de la fusión por absorción de Bankia con el objetivo de impulsar una entidad “más sólida, más eficiente y más rentable” que prevé convertirse en el mayor banco de España. Así lo anunció su presidente, Jordi Gual, durante junta celebrada en el Palacio de Congresos de Valencia, en una cita que ha calificado de “histórica” para el futuro de la entidad, nació hace más de 115 años.

Más de 15.400 accionistas, entre presentes y representados, participaron en el encuentro, con lo que se ha alcanzado el 70,3% del capital social. Se prevé que la fusión se materialice durante el primer trimestre del 2021 y que la integración operativa entre las dos entidades se ejecute antes de finalizar 2021.

El consejero delegado de Caixabank, Gonzalo Gortázar, aseguró que la operación es “una gran oportunidad de crear valor para todos los grupos de interés incluyendo, por supuesto, a los accionistas”.