Insatisfactorio por insuficiente. Así considera el Gobierno asturiano el nuevo estatuto electrointensivo, por lo que desde el ejecutivo regional se va a reclamar al central "nuevas compensaciones" para la gran industria. Se entiende desde Asturias que el estatuto electrointensivo aprobado ayer por el Consejo de Ministros no es suficiente para empresas radicadas en la comunidad como la siderúrgica ArcelorMittal o la metalúrgica Asturiana de Zinc. Por ese motivo el Gobierno de Adrián Barbón defenderá que existan partidas presupuestarias "suficientemente dotadas para maximizar las ayudas contempladas en el nuevo marco legal", tanto las previstas para el desarrollo del estatuto como las relativas a las compensaciones de costes indirectos de CO2, que deben "elevarse hasta el tope permitido".

Además, se pedirá la implementación, "en el menor tiempo posible", de mecanismos sustitutorios de las subastas de interrumpibilidad como la reserva estratégica de respuesta rápida que contemplen las singularidades de la industria altamente consumidora en energía.

El consejero de Industria, Enrique Fernández, ha advertido que las compensaciones previstas en la nueva norma se quedan cortas para las industrias altamente electrointensivas de la región, que sufren "un lastre de competitividad" por el diferencial de costes energéticos frente a otros países de la Unión Europea como Francia o Alemania. Fernández entiende que, si bien la creación de un marco jurídico estable y predecible es positivo porque puede aportar seguridad al sector industrial, sin embargo en el caso de Asturias no se ven atendidas parte de las alegaciones conjuntamente se elaboraron con las comunidades limítrofes de Galicia y Cantabria.

El texto definitivo, que se publicará en el Boletín Oficial del Estado (BOE), aún no es manejado por el ejecutivo regional pero el Consejero de Industria ya adelanta que "no da una respuesta satisfactoria a las singularidades de las empresas asturianas con un consumo intensivo de electricidad", pertenecientes a sectores y subsectores económicos "en claro riesgo de fuga de carbono y con desventajas competitivas frente a otros países de la UE".

Ell Ejecutivo autonómico incide en que las industrias altamente electrointensivas con actividad productiva en Asturias son "las más expuestas a la competitividad internacional" y las que, por pautas y volumen de potencia y energía demandadas, "pueden contribuir con un mayor potencial a la mejora de la gestión técnica y económica del sistema eléctrico".