La plantilla de la acería de Gijón de ArcelorMittal se pronunciará hoy en un referéndum –en urna y, por lo tanto, de forma confidencial– sobre el ajuste propuesto por la multinacional en este taller y que incluye la amortización de 14 puestos de trabajo. La votación se espera que sea reñida. CC OO y la CSI –los dos sindicatos mayoritarios en este taller– ya se han manifestado en contra del acuerdo, mientras que UGT y USO –amplia mayoría en el comité de empresa de la multinacional– lo harán a favor. La incertidumbre es total.

El referéndum es importante porque de salir el “no” obligaría a los sindicatos a volver a sentarse a negociar con la multinacional el posible ajuste en este taller, que hace unas semanas vivió una enorme conflictividad. CC OO y la CSI habían convocado una huelga en esta instalación en protesta por los planes de ajuste que acabó derivando en un cierre patronal. Las asambleas del resto de plantas de largos de Gijón –carril y alambrón– ya dieron su respaldo de forma mayoritaria a los ajustes en sus respectivos talleres.

Por otro lado, ArcelorMittal logró arrancar el sínter A de su factoría de Gijón, tras solventar el problema técnico que impidió su puesta en marcha en la fecha inicialmente prevista, el pasado lunes día 4. El sínter ya estaba plenamente operativo a primera hora de esta mañana, tras haber arreglado la avería en uno de sus motores eléctricos, que se debió al largo tiempo que permaneció inactiva la instalación, parada desde abril del año pasado.

La instalación permaneció inactiva todo este tiempo al incumplir la autorización ambiental integrada que el Principado había otorgado a Arcelor, en la que se reducía notablemente el límite de emisiones contaminantes por su chimenea principal. Algo que la empresa va a lograr instalando un filtro de mangas, obra que debía de haberse acabado de ejecutar el 31 de diciembre de 2019, pero que por diversos problemas entre el contratista principal y otras subcontratas ha sufrido importantes retrasos.