La pandemia del coronavirus está haciendo estragos en el mercado laboral. Tanto que Asturias despidió el aciago 2020 con 82.070 personas inscritas en alguna de las oficinas del Servicio Público de Empleo de la región, interrumpiendo abruptamente una racha de cinco años de mejoría de las cifras. Ante esta situación, ¿qué puede esperarse del mercado laboral en este 2021 que acaba de echar a andar? Los expertos en recursos humanos de la región aseguran que la mejor palabra que define el futuro del empleo es “incertidumbre”. Aun así, habrá oportunidades laborales. ¿Dónde? Lo tienen claro. Hay cuatro actividades que ya están tirando del carro y generando empleo. Son las nuevas tecnologías (TIC), el sector agroalimentario, el del transporte y la logística, y, por último, buena parte de la industria regional que comienza a tener buena cartera de pedidos de fuera, especialmente de China. El problema es que la pujanza en estos sectores –inmunes a la pandemia laboral– no da para cubrir la fuerte destrucción de empleo que padece la hostelería o el comercio.
“El tecnológico va como una moto, proyectos que se iban a hacer a medio plazo, para dentro de cinco o diez años, se han desarrollado en solo unos meses. Es un sector cohete”. La reflexión es de Enrique Riesgo, de la compañía asturiana Fida Consultores, que asegura que en estos días las competencias digitales son esenciales, y, prácticamente, imprescindibles entre los candidatos que opten a conseguir un empleo. El impulso que están viviendo las compañías tecnológicas tiene otra explicación. La pandemia ha acelerado considerablemente la digitalización de sus clientes, muchos tuvieron que ponerse las pilas para poder sobrevivir. Y, claro, la demanda de los servicios de este joven pero pujante sector asturiano ha subido con una tremenda fuerza estos últimos meses.
Riesgo añade que “otro de los sectores que están teniendo una tendencia imparable es el agroalimentario”. Y es que la pandemia ha traído consigo un claro cambio de hábitos entre los consumidores. “Está creciendo la demanda de productos de proximidad y de lo que se llama ‘slow food’ (que traducido del inglés significa algo así como ‘comer despacio’) y de productos artesanales. Es ya una tendencia en toda regla”, agrega. Eso, evidentemente, está teniendo importantes repercusiones para el campo asturiano, falto de alegrías. Es una especie de vuelta a los orígenes.
Añade Riesgo otro sector a la lista de los que se están salvando de la salvaje destrucción de empleo que afecta al mercado laboral. Se trata de las compañías que están ligadas con lo que se conoce como la “economía plateada”. Es decir, aquella que tiene como clientes a la tercera edad, a los mayores. “En Asturias hay ya bastantes empresas que se dedican a eso, a la ortopedia, a la fisioterapia o a facilitarles servicios que mejoren su calidad de vida de estas personas”, resalta.
Ahora el que agrega otra actividad a este saco es Miguel Morán, de RHO Consulting. “Está subiendo todo lo que está relacionado con el transporte o la distribución. La gente ya no se mueve de casa”, asegura. Esto está relacionado con los cambios de hábitos que ha traído consigo el coronavirus, y que ha provocado un fuerte ascenso del comercio online y de la comida para llevar que se está traduciendo en que por las calles asturianas circulen ahora muchas más motos y furgonetas de reparto que hace un año, cuando la pandemia era solo cosa de China. Ligado con eso, Morán apunta que hay, por ejemplo, una mayor demanda de cartón que está beneficiando a algunas compañías de la región que se dedican a esa actividad.
Mercado Chino
Paradójico, pero, sostiene Morán, hay sectores en los que está subiendo tanto la demanda de personal que ya hay problemas para cubrir puestos. Pese al elevadísimo número de parados. Sucede, como antes de la crisis, en el sector del metal. “Tenemos problemas para encontrar soldadores. Hay una demanda tremenda”, apunta. Es más, Asturias tiene también una potente industria que se dedica a la fabricación de componentes para coches (en la región se fabrican parabrisas, amortiguadores, cajas de cambio...) y, según asegura Morán, es otro de los sectores que más están subiendo últimamente en empleo. Tiene una explicación. “El mercado chino es el que está tirando por la demanda, allí las ventas están creciendo en más de un 30% y eso está repercutiendo en la actividad de las fábricas asturianas”, explica.
Una vez repasados los sectores en los que puede haber una mayor demanda, José Luis Álvarez, de Recursos Más Humanos y exdirector regional de Empleo del Gobierno asturiano, alerta de los posibles riesgos que ha traído el coronavirus. El principal, asegura, es el de que esta crisis agrande la ya de por sí amplia dualidad del mercado laboral. Eso supone que habrá –como ya ocurre en la industria o en las nuevas tecnologías– determinados sectores en los que haya bastantes problemas para encontrar personal cualificado y, al mismo tiempo, una gran bolsa de desempleados, con baja formación y que encadenen contratos temporales con temporadas apuntados en el Servicio Público de Empleo. “El mercado laboral estará más dualizado, y la incertidumbre laboral va a ser la tónica que marque este 2021”, asegura Álvarez.
Por eso, los retos son mayúsculos y consisten en alinear a los estudios de Formación Profesional y a los universitarios con las necesidades reales de las empresas. Álvarez asegura que todo apunta a que el mercado laboral “crecerá” este año. Más que nada porque la caída durante 2020 fue muy profunda. Muchísimo. “Ahora, también cabe añadir, que esa tendencia dependerá de la evolución de la pandemia y del impacto que esta tenga en sectores como el comercio o el turismo”, agrega Álvarez, que son dos de las actividades que mayor empleo surten. Lo que no tienen tan claro es que el teletrabajo haya venido para quedarse, como sostienen muchos analistas. “Tiene sus cosas buenas, pero también se ha demostrado que con las distancias se pierde creatividad. Al final, lo que quedará será una especie de fórmula mixta”, vaticina.
Las valoraciones
“Tenemos problemas para encontrar soldadores. En la industria hay una demanda tremenda”
Miguel Morán
RHO Consulting
“El teletrabajo tiene sus cosas buenas, pero también ha demostrado que se pierde creatividad”
José Luis Álvarez
Recursos Más Humanos
“El sector tecnológico va como una moto, como un cohete, lo mismo que el agroalimentario”
Enrique Riesgo
Fida Consultores
