Cualquier fallo basta. Incluso una coma mal puesta. Las asesorías asturianas vienen notando desde hace un tiempo cómo la Inspección de Trabajo ha incrementado la presión sobre los expedientes de regulación de empleo temporal (ERTE) a los que han tenido que recurrir muchas compañías asturianas para hacer frente a la caída de actividad a causa de la pandemia del coronavirus. Van a la caza de cualquier tipo de irregularidad, de que se cumplan los horarios, que no haya contrataciones irregulares, “miran hasta las comas de los expedientes”, protesta un asesor laboral. Aunque, por el momento, este chequeo no se está traduciendo en multas, que están siendo mínimas. Aunque los laboralistas no descartan que en unos meses todas estas inspecciones puedan acabar traduciéndose en sanciones. Probablemente, para el verano.
“Miran hasta si desde la asesoría te confundiste en la redacción del expediente, lo miran todo. También es verdad que luego sanciones está habiendo más bien pocas”, resume Marcos Martínez, presidente del Colegio de Graduados Sociales de Asturias. Y añade: “Van rastreando que haya habido algún tipo de fraude, y además de eso están pidiendo papeleo que ya le habíamos entregado a la dirección de Trabajo, al final, están haciéndonos trabajar el doble”.
¿Qué es lo que buscan? Por ejemplo, si la compañía, aunque tenga un ERTE en marcha hace algún tipo de contratación laboral. Y, aunque parezca una contradicción, está ocurriendo en algunos negocios. Y si está bien justificado, es perfectamente legal. Lo explica Manuel Prieto, de MP Asesores, que asegura que “hay algunas empresas hosteleras que pueden tener regulados a sus camareros, pero que ahora necesiten reforzar la cocina para hacer comidas para llevar, o que necesitan repartidores”. Y señala que “la Inspección de Trabajo debe de tener una especie de alarma que salta en cuanto detectan algún tipo de anomalía en ese sentido”. En su despacho, añade, “es rara la semana que no tenemos varias inspecciones”. Los inspectores también piden, en el caso de las regulaciones por reducción de jornada, los horarios de los trabajadores para comprobar que se están cumpliendo de forma estricta.
La presión está comenzando ahora, pero el plan del Ministerio de Trabajo es intensificar la labor de la inspección en las próximas semanas. Y no solo sobre sobre los expedientes. La pandemia ha obligado a acometer múltiples cambios en el mercado laboral, como la regulación del teletrabajo, sobre el que la Inspección pondrá la lupa próximamente, advierten los asesores laborales. Por el momento, no lo está haciendo. Están dando algo de manga ancha para que las compañías vayan regularizando las condiciones de los empleados que tienen en sus casas trabajando.
Volviendo a los ERTE, Víctor Rodríguez, asesor laboral en la Asesoría Buenavista de Oviedo, asegura que “el hecho ya solo de juntar toda la documentación que nos piden nos lleva mucho tiempo. Mucha más carga de trabajo”. Agrega: “El caso es que tienen cuatro años para hacerlo, porque todo esto no prescribe hasta esa fecha. Además, están revisando muchas empresas en las que sí que se han hecho bien las cosas”. Todo esto se produce en un contexto en el que las restricciones están obligando a muchos negocios a tener que tirar de los ERTE. Las cifras son espectaculares. Desde que comenzó el confinamiento allá por mediados de marzo, la Dirección General de Trabajo del Gobierno asturiano tuvo que tramitar más de 20.000 expedientes de regulación. El dato lo dio hace unos días el consejero de Empleo, Enrique Fernández, en la Junta.
Luis Antuña, asesor laboral de Llana Consultores, alerta también de que lo próximo será la inspección de las empleadas del hogar para comprobar si se han adoptado las últimas medidas para mejorar las condiciones laborales de este colectivo. Lo dice con conocimiento de causa ya que la Inspección ha enviado una circular alertando del inicio de esta campaña.
- ERTE. La Inspección de Trabajo tiene en marcha una campaña para la revisión de los expedientes temporales de regulación de empleo (ERTE) que han usado las empresas para hacer frente a la crisis.
- Otras medidas. Paralelamente, los inspectores laborales también tienen previsto poner la lupa sobre las empleadas del hogar, para comprobar si se han adoptado las últimas mejoras aprobadas.
- Teletrabajo. Los asesores fiscales advierten de que en unos meses la Inspección también tiene previsto realizar una campaña para comprobar irregularidades entre los empleados que aún están teletrabajando.