La compañía cervecera holandesa Heineken llevará a cabo un recorte global de unos 8.000 puestos de trabajo, el 9% de su plantilla mundial, que afectará también a los trabajadores de la multinacional en España, donde cuenta con 1.590 empleados. La compañía cerró el ejercicio 2020 con pérdidas de 204 millones de euros, frente al beneficio neto de 2.166 millones en 2019, como consecuencia del impacto adverso de atípicos y amortizaciones por la crisis del covid. La empresa ha anunciado a los representantes sindicales y a las autoridades laborales su intención de iniciar un procedimiento de despido colectivo.