La ingeniería gijonesa I-Lanza crea en Chile su cuarta filial extranjera

El grupo amplía su área de negocio y suscribe una alianza para entrar en fotovoltaica e hidrógeno

La ingeniería gijonesa I-Lanza, especialista en proyectos llave en mano para climatización, ventilación, eficiencia energética y contraincendios, acaba de constituir su cuarta filial en el extranjero con la creación de I-Lanza Chile, con sede en Santiago de Chile. I-Lanza, fundada en 2008, ya está presente con sedes permanentes desde hace algunos años en Senegal, Arabia Saudí y Catar, y cuenta con delegaciones que abren y cierran, según la cartera de proyectos, en otros siete países.

La implantación en Chile supone su primera entrada con vocación permanente en el continente americano, aunque el grupo ya ha tenido operaciones y oficinas de apoyo en Colombia.

I-Lanza comenzó a estudiar el proyecto chileno antes de la pandemia y ha sido ahora cuando ha decidido dar el paso. La filial chilena (participada al 100% por la matriz gijonesa) ya está trabajando en el diseño de ofertas y espera entrar en plena actividad operativa el año próximo con el primer proyecto.

La compañía gijonesa ha suscrito a su vez una alianza con la empresa madrileña Ingelios, especializada desde hace más de veinte años en ingeniería fotovoltaica. El acuerdo permitirá a I-Lanza entrar en este sector de las energías renovables pensando tanto en el desarrollo de proyectos fotovoltaicos como en su aplicación para acometer la generación y aprovechamiento de hidrógeno verde (obtenido a partir de energías limpias) para autoconsumo (con potencias de 1 a 4 megavatios), y que permita a los clientes desvincularse del consumo de combustibles fósiles. Ingelios realiza los estudios y la dirección de obra, aunque también tiene una pequeña ingeniería. La empresa gijonesa aportará a la alianza su ingeniería y el montaje.

Evolución

I-Lanza, con sede en Gijón, cuenta con tres instalaciones en el polígono de Roces, dedicadas a oficinas, talleres y centro logístico, respectivamente.

La empresa asturiana, que surgió en 2008 con un empleado y una cifra de negocio de 100.000 euros, factura ahora 11 millones de euros y tiene una plantilla de 75 trabajadores, además de subcontratar a personal en los países extranjeros en los que opera. La plantilla está integrada por personal salido fundamentalmente de la Universidad de Oviedo (ingenieros y otros titulados) y en el 90% de los casos formado a su vez en la propia empresa. Desde su creación, I-Lanza ha crecido tanto por vía orgánica como mediante las adquisiciones de varias empresas.

En 2019, la sociedad fue elegida como una de las tres mejores empresas jóvenes de España por la Confederación Española de Asociaciones de Jóvenes Empresarios (Ceaga) y en 2004 logró a su vez unos de los accésits de los premios de Ceaga a jóvenes empresarios.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents