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Lavandero: “No se puede prescindir del plástico, la alternativa es más contaminante”

La directora de innovación de Klöckner (la antigua Terpla) defiende el esfuerzo de la planta de Pravia por adaptarse a las normas de la UE

Ana Fernández Lavandero, durante su conferencia. | Luisma Murias

El objetivo es extremadamente ambicioso. Y los deberes se los ha puesto la Unión Europea. Los envases de plástico, un sector que en Asturias da empleo a 430 personas –las que trabajan en la planta que Klöckner Pentaplast (la antigua Terpla) tiene en Pravia– deben ser completamente reciclables (“verde”) a lo largo de esta década. De aquí a 2030. La directora de innovación de la compañía praviana, Ana Fernández Lavandero, hizo un llamamiento ayer en Oviedo a dejar de “demonizar” al sector de los plásticos, del que aseguró que no era el culpable del calentamiento global. “El desperdicio de comida es un problema mucho mayor”, señaló. Lo hizo durante la apertura del ciclo de conferencias y coloquios titulados “Perspectivas de la industria asturiana”, que se celebrarán durante las próximas semanas en el Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA).

Las plantas pravianas de Klöckner Pentaplast están haciendo un esfuerzo mayúsculo para adaptarse a esa nueva normativa europea que viene derivada, sostuvo Fernández Lavandero, “por las imágenes que se divulgan de envases de plástico en el mar, que no niego que no sean un problema, pero no el principal”. Es mucho más importante, a su juicio, el impacto que tiene toda la comida que se cultiva o se cría (como las vacas) y que luego acaba desperdiciándose. Para completar el ejemplo, aseguró que, si de un país se tratara, “el desperdicio de alimentos sería el tercero más contaminante del mundo, justo por detrás de China y de Estados Unidos”.

El esfuerzo de la compañía asentada en Pravia durante estos años para hacer sus productos –bandejas de plástico para alimentos– mucho más sostenibles está dando sus frutos. Tanto que ahora sus bandejas son un 40% más ligeras de lo que eran hace algo más de una década. “Nosotros empezamos a usar ya materiales reciclados en 2007”, argumentó. Eso se traduce en que la compañía reaprovecha en Pravia dos millones de botellas de plástico al día para elaborar sus productos. Todo un ejemplo de lo que ahora se conoce como economía circular. Tal es el compromiso con el reciclaje que asegura que ya se está generando una economía entorno a la factoría, formada por pequeñas empresas, que son las que le aportan los materiales necesarios para su proceso productivo.

“Si el desperdicio de alimentos fuera un país, sería el tercero más contaminante del mundo”

Ana Fernández Lavandero - Klöckner Pentaplast

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“No podemos prescindir del plástico porque el impacto medioambiental de otros materiales es mucho mayor”, recalcó. Y eso que, en contra de la opinión popular, el del plástico ya es un sector que tiene unos elevadísimos niveles de reciclaje. Para hacer la comparación en esta ocasión tiró de la tasa de reciclaje de vidrio que, dijo, llega al 45%, mientras que la de poliestireno alcanza el 80%. De cara al futuro otro de los retos importantes será el de inculcar una mayor cultura del reciclaje en los hogares para ayudar a luchar contra el calentamiento global, defendió.

Bruselas ya les ha puesto la cruz a muchos productos elaborados con plástico, especialmente a aquellos denominados de un solo uso, como las pajitas de los refrescos. Visto el horizonte, las propias grandes marcas y cadenas de alimentación están comenzando a demandar a los fabricantes el uso de plásticos realizados con material reciclado. En eso, en Pravia ya llevan unos cuantos años de ventaja.

En su introducción Fernández Lavandero hizo también un repaso a la historia de la compañía, que acaba de cumplir 31 años y que nació gracias a la iniciativa de un grupo de emprendedores pravianos que vieron en la fabricación de envases de plástico una oportunidad de negocio. “Crecimos tan rápido que casi acabamos muriendo de éxito”, rememoró. Ahora, Klöckner Pentaplast vende productos desde Pravia por valor de 90 millones de euros y el 30% de su producción tiene como destino los mercados internacionales.

Uno de los coordinadores de las conferencias, el catedrático Mario Díaz, fue el encargado de presentar esta edición del ciclo de charlas en las que se analizarán las perspectivas de los sectores del agua mineral, el embalaje y la transformación digital.

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