El vicepresidente del Principado, Juan Cofiño, señaló ayer que la energía eólica es la “gran alternativa” que tiene Asturias para compensar el cierre de las centrales térmicas de carbón y que la región no puede renunciar a su desarrollo. Destacó que el despliegue será “planificado” y que en ningún caso afectará a parques naturales y zonas protegidas, aunque reconoció que habrá impactos negativos. “No hay coste cero, pero debe ser el menor posible y hay que ayudar para compensarlo”, señaló Cofiño.
El vicepresidente y consejero de Medio Ambiente compareció en la Junta General a solicitud de la diputada de Podemos Asturies Nuria Rodríguez, que reclamó “control” para evitar “un pelotazo” de las empresas energéticas en la región. A su juicio, la instalación desordenada de parques eólicos afecta negativamente a los sectores ganadero y de turismo rural, genera impacto acústico y reduce del valor de las viviendas cercanas. “¿No hay viento en el Oriente de Asturias?”, pregunto Rodríguez ante la concentración de proyectos en el Occidente.
“El mapa de vientos responde a criterios científicos”, respondió Cofiño, que lamentó que se trate de crear “una confrontación territorial sin fundamento”. El Vicepresidente negó que haya una “avalancha” de proyectos eólicos y dejó claro que “no habrá autorización” para el parque planteado en Somiedo.
