Belarmino Feito se despidió ayer de la presidencia de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE) con cuatro deseos. “Deseo que se ponga fin al problema de la falta de mano de obra que llevamos 20 años denunciando; deseo que la transición energética sea justa con Asturias; deseo que las empresas aprovechen bien los fondos de recuperación europeos, y deseo que los problemas actuales con los costes energéticos y de la luz se solucionen”, destacó durante la clausura de la asamblea de la patronal asturiana del metal (Femetal) en el que fue su último acto público como patrón de los empresarios asturianos. El miércoles le sustituirá al frente de la FADE la empresaria María Calvo.

Feito destacó el amplio consenso que ha alcanzado Calvo –que obtuvo 97 avales de los 167 que estaban en juego– y aseguró que “es para sentirse orgullosos que la FADE vaya a tener como presidenta a una mujer”. Aprovechó también su intervención para salir una vez más en defensa del mundo de la empresa que en ocasiones ha estado denostado, dijo.

Visiblemente emocionado, agradeció al líder de Femetal, Guillermo Ulacia, el apoyo y “la amistad” recibida durante estos últimos años. “No ha habido ni una sola vez de las que he hablado con él que no haya aprendido algo”, añadió. Y, ya que entre el público había un buen número de empresarios y representantes de asociaciones, también aprovechó para agradecerles el apoyo durante estos últimos tres años y medio. Fue despedido con un larguísimo aplauso.