Rufino Orejas, presidente de Industria Química del Nalón, sacó pecho ayer ante la evolución de una de las filiales del grupo, Nanovex. “Tiene mucha proyección, estamos muy ilusionados con este proyecto, en hacerlo crecer y que pueda generar trabajo, riqueza, innovación y que sea líder en su sector”, apuntó durante una visita a las instalaciones de esta compañía, en el parque tecnológico de Llanera. En la visita, Rufino Orejas estuvo acompañado del consejero de Ciencia, Innovación y Universidad, Borja Sánchez, y del alcalde de Llanera, Gerardo Sanz. “Es una empresa de nanotecnología que consigue administrar los fármacos encapsulándolos para poder trasladarlos, protegerlos y liberarlos en las dianas terapéuticas y que hace que los procedimientos sean más eficientes y tengan menos efectos secundarios. Eso tiene muchas aplicaciones en la medicina y la cosmética”, resaltó Orejas. Su tecnología es muy similar a la de las vacunas contra el coronavirus, usa el ARN mensajero para que el fármaco llegue a su destino.
Borja Sánchez resalto que “este es un ejemplo de cómo una industria química trata de diversificarse en el campo de la nanotecnología utilizando una ‘spinoff’ que surge de la Universidad de Oviedo. Esta es una fórmula de colaboración público privada que a la gran empresa le puede ayudar a ir más rápido en su diversificación”.
