La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La oposición afirma que Industria necesita “mucho más” que un cambio de director

Los sindicatos piden recursos y peso político para el departamento que asume Juan Carlos Aguilera en sustitución de Rosana Prada

Juan Carlos Aguilera

Los grupos de la oposición en la Junta General del Principado coinciden en que los cambios que necesita la consejería de Industria van más allá de un relevo en la dirección general del ramo. Lo afirmaron después de que el lunes el Gobierno regional anunciara que Juan Carlos Aguilera, actual director de la Fundación Asturiana de la Energía (FAEN), sustituirá a Rosana Prada.

Álvaro Queipo (PP), señaló que “el relevo de Rosana Prada es la forma con la que el Consejero, Enrique Fernández, confirma lo desde el PP ya hemos denunciado a lo largo de toda esta legislatura: la política industrial del Gobierno autonómico es pobre, difusa y errática. Prada paga, con su salida, la impotencia de un Consejero que no sabe hacia dónde avanzar y que, sin duda alguna sabe que el próximo cese que se tenga que producir será el suyo propio”.

Susana Fernández (Cs) destacó el “momento crucial para la industria asturiana” y que su grupo espera que “el nuevo director general lidere el nuevo proceso de transformación y reconversión que está sufriendo Asturias y sepa gestionar la llegada de fondos europeos en proyectos viables y de futuro”.

Daniel Ripa (Podemos) tiene la sensación “de que se releva a la persona que no es la responsable definitiva y final del desastre en el que se ha convertido la consejería de Industria en los últimos meses” y que “hay un responsable con nombre y apellidos que es el consejero de Industria, Enrique Fernández”. A su juicio “ha presentado una política industrial errática y unas decisiones muy equivocadas en asuntos como Duro Felguera , Vesuvius o Vauste, en las que la consejería no ha estado a la altura” y en la estrategia de Asturias 2030 “no hay planes, no hay cronograma ni objetivos ni acciones concretos”.

Ángela Vallina (IU) apuntó que “el cambio parece que viene a reforzar la idea de que la consejería de Industria apuesta aún más por proyectos del sector energético de cara a su financiación con los fondos europeos a pesar de las dudas que se han planteado respecto a ese monocultivo”.

Adrián Pumares (Foro) afirmó que “el cambio que se necesita en la Consejería es más profundo que un simple cambio de nombres en la Dirección General de Industria, de hecho proponemos que el área lo asuma el consejero de Ciencia”.

Ignacio Blanco (Vox) destacó que su grupo ya advirtió hace tiempo “que había que ponerse seriamente con la gestión y tramitación de los fondos europeos” y que no encontraron respuesta sobre el equipo que estaría al cargo. “Han esperado a finales de septiembre para empezar a tomar decisiones que creemos llegan tarde, pues los proyectos parece ser que están elegidos sin ni siquiera conocer un criterio de baremación” de los mismos de cara a la adjudicación de los fondos europeos”, dijo Blanco.

Los sindicatos

José Manuel Zapico (CC OO) declaró que “en estos momentos falta un liderazgo político del Gobierno regional en materia industrial frente al Gobierno central” y que “no es tanto un problema de cambiar personas como de destinar recursos, la consejería de Industria ha de estar a la altura de las circunstancias”. Sobre Aguilera, Zapico afirmó que a su sindicato le “consta su solvencia y conocimiento”.

Javier Fernández Lanero (UGT) juzgó el cambio como “muy relevante” y reclamó a Aguilera que “ponga toda su experiencia y conocimiento en el ámbito empresarial y en el sector industrial y toda su capacidad política” en el empeño porque “nos estamos jugando mucho en el sector”. “Es una dirección general muy importante y precisa mucha acción política” para “ser exigente” con el Gobierno central” y tener al tiempo “capacidad de consenso y de interlocución”. señaló.

La patronal FADE no expresó valoraciones sobre el cambio.

Compartir el artículo

stats