El precio mayorista de la electricidad (el que abonan las empresas comercializadoras a las de generación) alcanzará hoy su tercer nivel más alto hasta ahora conocido, con un coste de 174,68 euros por megavatio. Es la mayor carestía desde el pasado miércoles, cuando se situó en los 175,87 euros. El récord absoluto se estableció el día 16, cuando llegó a los 188,18 euros.

El precio vigente hoy en el mercado mayorista es el 6,9% superior al de ayer, que, con 160,22 euros, fue el domingo más caro de la historia.

Esta tendencia alcista de los precios se produce en un contexto de creciente carestía de la electricidad en Europa por las condiciones del mercado internacional: fundamentalmente, por la escalada de precios del gas natural, y, en menor medida, por el encarecimiento de los derechos de emisión de CO2. España y Portugal (que comparten el mismo precio) se ven más penalizadas por su mayor dependencia energética exterior y por las bajas interconexiones con el resto de Europa.

El traslado de los precios mayoristas al consumidor final no tiene la misma intensidad porque el coste de la energía representa en torno a un tercio del recibo. Sin embargo, la tarifa regulada (la llamada PVPC), a la que están adscritos el 37% de los usuarios –y que suele ser un 20% más barata que las tarifas de libre contratación en el mercado–, experimenta un mayor impacto por estar muy indexada al mercado mayorista desde que en tiempos del ministro Soriase creó la PVPC en 2013. Éste es un nivel del exposición sin parangón en Europa.

La repercusión del precio al por mayor en el recibo de los consumidores se debería ver a su vez atenuado por las decisiones tomadas por el Gobierno: rebaja del IVA y del impuesto especial, suspensión temporal del tributo sobre la generación, limitación del beneficio de las plantas que no incurren en costes por el CO2 y sin embargo se benefician de su alto precio, aumento de la partida procedente de la subasta de derechos de emisión para abaratar la factura, y subastas de electricidad al margen del mercado mayorista o “pool”.