La compañía minera Orovalle ha denunciado una serie de “actos vandálicos” cometidos en las inmediaciones de sus instalaciones en Belmonte de Miranda coincidiendo con las jornadas de huelga convocadas por el comité de empresa entre los días 23 y 28 de diciembre. Según la compañía, estos actos vandálicos han consistido en cortes de árboles y acumulación de madera en las carreteras comarcales, en la colocación de piedras de grandes dimensiones en las carreteras, la quema de contenedores y neumáticos, y el bloqueo de carreteras y accesos, lo que supone “un grave riesgo para todos los usuarios de las vías públicas”. Orovalle, que ha pedido al comité de huelga que rechace cualquier manifestación de violencia, insiste en que la convocatoria de paros es “infundada y desproporcionada” y por ello ha pedido a la representación de los trabajadores que exponga de forma detallada los supuestos incumplimientos por parte de la dirección. Orovalle dice que la convocatoria de movilizaciones pretende evitar abordar la cuestión que sí supone un incumplimiento real del convenio colectivo: la ausencia del Plan Integral de Prevención y Actuación sobre el Consumo de Drogas y Alcohol, que “debería estar en vigor desde el 31 de marzo de 2020 y está bloqueado por la parte social”.