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Nuevas tecnologías

Nómadas digitales: el reto de trabajar desde cualquier sitio

Se trata de dejar la oficina y desarrollar la actividad laboral desde distintos lugares; la única condición es la conexión a internet

Nómadas digitales: el reto de trabajar desde cualquier sitio @dianamillos

¿Qué se necesita? Un ordenador portátil y un móvil (y cámara de fotos si se trata, como en este reportaje, de blogueros e influencers que crean contenido sobre viajes, turismo, gastronomía, tendencias, etc... Es una tendencia, con otro planteamiento laboral, que se percibe desde hace unos años y con la pandemia se ha multiplicado. ¿Qué es un nómada digital? Aquella persona que trabaja usando las nuevas tecnologías y cuyo trabajo se puede desarrollar independientemente de donde se encuentre. Solo necesita tener una buena conexión a internet. Hay personas que prefieren moverse, viajar, no estar siempre en el mismo lugar y echan mano de las ventajas de la era virtual para desarrollar su oficio. Según una encuesta realizada por Rumbo, el 26% de los españoles o ya son nómadas digitales o están preparándose para comenzar la travesía. En esto también influye el posicionamiento del teletrabajo durante los años de pandemia por coronavirus.

Pros y contras

¿Los pros y los contras? “Vas a los sitios que te da la gana. Teniendo conexión a internet y móvil, te da igual. Puedes hacer tus propios horarios. Tienes unos objetivos que hacer, compromisos con tal empresa o lo que sea... Porque siempre van surgiendo trabajos de marketing, colaboraciones, y acabas cogiéndolos todos, claro”, cuenta Alberto Ribas, autor del blog de viajes, turismo y gastronomía “Alvientooo”. ¿Los contras? “Que tienes que estar todo el día buscando lugares para trabajar que sean más o menos cómodos. Puedes necesitar material que no tienes contigo, consultar un libro o fotos guardadas en una memoria... Tienes que volver a montar tu minioficina en cada viaje y eso lleva su tiempo. Sobre todo en lugares que no están muy preparados”, apunta.

Pese a todas las trabas, considera que es muy enriquecedor. “En cada viaje conoces gente nueva, gente que hace cosas variopintas... y gente que te ayuda en muchas ocasiones, con cualquier problema que tengas, siempre hay alguien con capacidad para hacer de técnico, de informático... Es una nueva mentalidad en la que tú colaboras con todo el mundo y todos colaboran contigo”, expresa el bloguero pontevedrés.

Para Diana Millos, ser bloguera de viajes supuso reunir en una sola faceta varias pasiones. “Los que trabajamos en redes estamos todo el rato conectados. No tenemos horarios. También es lo que nos gusta, va un poco en nuestra personalidad”, expresa esta influencer, natural de Vigo.

"Hace siete años, cuando empecé, era menos común"

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Hay temporadas que estoy todo el día fuera, en otros lugares, otros países, y temporadas más tranquilas, que paso más tiempo en casa”, cuenta Alberto Ribas, bloguero e influencer. Bajo el nombre de Alvientooo, Alberto Ribas, natural de Poio, crea contenido en su blog de viajes, con recomendaciones de destinos tanto en España como en otros países en base a su propia experiencia. Y recomienda desde lugares para dormir, comer, sitios curiosos, tendencias, lifestyle, etc... Todo ello redactado, como un viajero más, como él mismo dice que es, y salpicado con fotografías suyas en dichos lugares.

“Profesionalmente me dedico a esto desde hace siete años. Soy autónomo, antes estuve un tiempo como freelance, tenía dos trabajos. Ahora me dedico solo a esto: hago marketing digital, comunicación online, blog, viajes... Fundamentalmente me centro en gastronomía y turismo. Participo, por ejemplo, en jurados gastronómicos. Me muevo a México, Colombia, Turquía, Italia, Japón... Al vivir aquí tengo más contenido de Galicia y Portugal. También de otras comunidades como Andalucía, voy bastante”, explica Alberto.

Ribas trabajaba en una consultora. “Yo estudié Relaciones Laborales. En mi trabajo era asesor de empresas: un mundo totalmente distinto a este. Hasta que decidí cambiar: me salió bien pero fue todo un proceso, claro”, expresa Alberto. Para emprender este nuevo camino de bloguero e influencer de viajes, por llamarlo de algún modo, se formó como community manager y en marketing digital. “Y poco a poco fue rodando todo. Es cierto que siempre que viajaba mis amigos me pedían que les recomendase sitios, que les describiera mis viajes. Fue por ello que decidí contarlo en un blog en lugar de estar enviándoles continuamente correos”, apunta Ribas.

Hace siete años, cuando decidió profesionalizar su actividad, ser nómada digital era menos habitual. “Yo, si tengo internet y va bien, me da igual el lugar, puedo trabajar desde cualquier parte. Además ahora te encuentras espacios de coworking en muchas ciudades en los que puedes pagar una tarifa diaria y trabajar más cómodo. También en hoteles y otros establecimientos ofrecen espacios para trabajar. Te conectas, incluso imprimes... Está mucho mejor. Cuando yo empecé había alguna persona de otros países, sobre todo, que lo hacía. Pero no muchos”, cuenta Alberto. ¿Lo de perder aviones? “Pasa a veces. Lo integro. Los aeropuertos me gustan, no me enfado cuando cancelan vuelos. Me lo tomo así”, indica Ribas, que añade que procura tener siempre un ordenador decente, cámara con un par de objetivos y móvil.

"Prefiero la incertidumbre a estar estancada"

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“Vivo con el ordenador de un lado para otro. ¿Full time? Llevo ya cinco años. Antes de dar el salto trabajaba como community manager en una empresa pequeña. Soy Licenciada en Psicología, me especialicé en Psicología Social. Me gustaba la Psicología pero no tanto como para dedicarme a ello. Por eso cuando acabé estudié un Máster en Comunicación y Márketing. Al final, el conocimiento sobre Psicología y lo que aprendí en el máster sumó mucho a la hora de aplicarlo en redes. Manejo blog y redes. ¿La que más? Instagram”, expresa Diana Millos, bloguera, influencer, creadora de contenido en www.dianamiaus.com y en todas las redes sociales que utiliza.

Así la describen en la red de redes: “Viajar. Descubrir esos trocitos de cada lugar del mundo y contarlo en fotos, esto es lo que hace @dianamiaus. Ha convertido sus dos pasiones en una forma de vida, y no podemos más que envidiarla hasta el infinito, porque madre mía… que fotones y qué sitios. Diana es de Vigo (¡y tenemos el gustazo de conocerla! ?? ) pero desde hace unos años su casa está en cada destino, en cada fachada o sitio alto al que sea capaz de subir, jajaja” (en www.vaidhe.com).

Cuenta esta influencer de viajes viguesa que su blog “está bien posicionado, unas 50.000 visitas mensuales”. “Es puramente de viajes. Lo que pasa que al principio, la gente que hacía contenido de viajes era más en plan mochilero. Yo no. Yo hacía ya fotos muy cuidadas: salgo posando, con mis vestidos, una buena edición... Creo que eso fue lo que me diferenció. Yo iba encontrando sitios que la gente no conocía, como un mirador de Oporto, al que le puse yo un nombre y la gente empezó a llamarle así y ahora consta con ese nombre en Google... Todo suma: Psicología, Marketing, Fotografía... Y a partir de ahí te vas adaptando a los cambios”, apunta Diana. 

¿Lo peor? “Estar conectada mucho tiempo (nuevas tecnologías). No poder desconectar. Hay veces que tengo una carga de trabajo muy grande, que no me da tiempo a hacer todo lo que tengo que hacer o que me gustaría hacer. Y otras veces menos”, apunta Millos.

Comenta que el futuro no le da miedo. “Casi prefiero este punto de incertidumbre antes de saber que estoy estancada en el mismo trabajo. Porque ya sé lo que es y solo podía viajar cuando tenía vacaciones o días libres y me gusta más la vida que llevo ahora”, expresa la bloguera. Según sus palabras, “hay mucha gente que no entiende su trabajo”. “Muchos piensan que esto no es un trabajo, me pasa mucho, que estás de vacaciones y no”, añade Millos, que destaca las campañas de trabajo en Nueva York y trabajar con marcas muy grandes. “No me lo hubiese imaginado”, concluye.

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