La Bolsa recuperó ayer su confianza en Duro Felguera, tras el desplome de sus acciones la víspera. La recuperación del valor de sus títulos, que remontaron el 22,16%, (llegaron a subir el 34,73%), se produjo tras comunicar la compañía que prosigue las conversaciones con varios "inversores industriales" dispuestos a aportar capital a la sociedad, que esta negociación está en una "fase muy avanzada" y que la compañía, en contra de lo conjeturado la víspera por un medio de información, no está pensando en pedir otro rescate público.
La dirección de Duro Felguera anunció el pasado 28 de junio en su junta general de accionistas que pretende materializar este mismo año la entrada en su accionariado de uno o varios de los inversores con los que se negocia. Ayer afirmó que prevé que esta ampliación de capital se haga "próximamente".
La compañía también sostuvo que la contratación se está intensificando" (se sitúa hasta este mes en 144 millones de euros) y que mantiene su objetivo de alcanzar este año los 300 millones. Duro afirmó que "está gestionando" la "optimización de la tesorería mediante medidas internas y a través de otras vías de financiación" y que ha reducido su "exposición global" a sus entidades financieras acreedoras en 33 millones de euros desde finales de 2021. Justificó el despido colectivo anunciado para adecuar la dimensión de la plantilla.
Los sindicatos pidieron ayer el apoyo de los grupos parlamentarios asturianos en su rechazo al ERE y exigieron a Duro y a los accionistas que se incorporen contrataciones en vez de despidos porque de la empresa se ha estado marchando personal de modo continuo, dijeron.
