En el paisaje urbano de Asturias vuelven a verse grúas. Entre enero y mayo los arquitectos técnicos visaron 855 viviendas de obra nueva, lo que supone el 39% más que en el mismo periodo del año anterior, cuando se visaron 615 viviendas según los datos que acaba de publicar la Sociedad Asturiana de Estudios Económicos e Industriales (Sadei). Las cifras de 2022 son las más altas desde 2018, en el periodo de recuperación económica que se interrumpió con la pandemia de coronavirus.
La pandemia de coronavirus también ha modificado el perfil de las construcciones, con un aumento de la vivienda unifamiliar. Así, las 855 viviendas visadas en los primeros cinco meses del año se reparten en 403 edificios.
Con respecto a la venta de las viviendas, el presidente de la Confederación Asturiana de la Construcción (CAC-Asprocon), Joel García, señaló que el ritmo en Asturias "no se ha detenido" pese a la incertidumbre por los efectos de la guerra de Ucrania la inflación y la subida de los tipos de interés. "Los promotores están vendiendo, pero con una subida de precios de los materiales que no se puede repercutir al comprador final porque ya hay unos contratos firmados", destacó Joel García, que añadió que esa situación acabará provocando una subida de precios de la vivienda.
Pese al crecimiento de la construcción de viviendas en los primeros cinco meses del año, el presidente de CAC-Asprocon no prevé un notable aumento al cierre del año. "Nos estamos moviendo entre las 1.000 y 1.500 viviendas anuales y seguiremos ahí", señaló.
