La puesta en marcha del Tren de Alta Velocidad en Portugal continúa siendo una cuestión de Estado donde la política y las rencillas del pasado tienen un peso crucial. Con la decepción de la última Cumbre Ibérica de Viana aún coleando, la conexión entre Galicia y el país vecino sumó un nuevo apoyo en el alcalde de Oporto, Rui Moreira, quien apuntó a la oportunidad que se abría para que los trenes entre la capital lusas y Madrid circulen a través de Vigo.
En una entrevista concedida a EFE, el regidor independiente del municipio aseguró que “la idea no es tan loca”. Según los proyectos presentados por ambos gobiernos el tiempo de viaje mediante la salida sur y la variante de Cerdedo rondaría las cinco horas.
En sus declaraciones también apostó por un avance en la descentralización del poder más allá de las regiones autónomas de Azores y Madeira, apuntando que “podemos empezar por el Norte, con un modelo como Galicia, que me encanta”.
Avances en el 'by-pass'
El Boletín Oficial del Estado sometía a información pública las necesidades de ocupación del proyecto de construcción de la renovación integral del tramo entre Redondela y la bifurcación de Arcade de la línea que continúa hasta Santiago.
Esta obra requerirá la expropiación de 4.491 m² en Redondela y Soutomaior que incluyendo los terrenos para servidumbres y ocupaciones temporales se multiplicará hasta las 16.717 m². Esta obra incluirá un by-pass que permitirá que los trenes procedentes de Portugal puedan continuar de forma directa por el Eje Atlántico.