Aena acelera su crecimiento tras el desplome de la actividad por el golpe de la pandemia. El gestor de aeropuertos, controlado en un 51% por el Estado español a través de Enaire, ha elaborado un nuevo plan estratégico para el periodo 2022 -2026 en el que mejora sus previsiones de actividad, de rentabilidad y con el que confirma que este año volverá a repartir dividendos tras suspenderlo para blindar sus cuentas en pleno parón por el coronavirus.

Aena, el mayor grupo aeroportuario mundial, ha revisado al alza sus previsiones para los próximos años por una esperada la mejora de la demanda de viajes aéreos. Los aeropuertos españoles registraron su máximo histórico con 275,2 millones de pasajeros en 2019, justo antes de la debacle del tráfico por la pandemia. La compañía ahora espera superar los niveles precovid ya en 2024, con casi 288 millones de viajeros, y rebasar la cota de los 300 millones de viajeros en 2025 y alcanzar los 315 millones en 2026.

“Somos optimistas pero con cautela”, ha subrayado el presidente de Aena, Maurici Lucena, en un encuentro con analistas para justificar la mejora de las previsiones para los próximos años, pero advirtiendo las altas dosis de incertidumbre económica que aún persisten. “Arrastramos cicatrices de los años de pandemia (…) Existen riesgos que Aena para incorpora para calcular sus previsiones”, ha alertado.

La mejora de la actividad aeronáutica, acompañada también de un esperado aumento del negocio comercial y de la inyección por las megaoperaciones inmobiliarias que prepara en sus grandes aeropuertos españoles, se traducirán también en una aceleración de los resultados financieros. Aena prevé recuperar el resultado bruto de explotación (ebitda) prepandemia entre 2024 y 2025, un escenario que desde la compañía se subraya como muy prudente.

La dirección de Aena se compromete a recuperar el reparto de dividendos con cargo a las cuentas de 2022 tras suspenderlo por la pandemia. El grupo mantendrá el pay-out del 80% (proporción de beneficio que se distribuye entre los accionistas) que tenía antes del covid. Además, la compañía calculará ese pay-out en relación al beneficio neto antes de los ajustes contables a los que les obliga la reforma legal que impone una rebaja forzosa del precio de sus alquileres comerciales hasta recuperar totalmente el tráfico precovid. “Esta medida supondrá un incremento de 1,37 euros por acción en el próximo reparto de dividendos, con cargo al beneficio neto de 2022”, subraya la compañía.