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Un grupo mexicano, principal candidato para entrar en el capital de Duro Felguera

La ingeniería asturiana mantiene conversaciones avanzadas con varios posibles interesados y no se descarta que entre más de un inversor

Por la izquierda, Jaime Argüelles, consejero delegado de Duro Felguera; Rosa Aza, presidenta, y Jesús Sanchez Lambás, secretario, en la última junta general de accionistas de la compañía. | Juan Plaza

Un grupo mexicano se perfila como uno de los inversores que tiene más avanzadas las conversaciones con Duro Felguera para su eventual entrada en el capital de la ingeniería asturiana, según fuentes al corriente de las negociaciones.

La compañía asturiana, que acaba de pactar un expediente de regulación de empleo para recortar hasta un máximo de 180 puestos de trabajo en Asturias (además de otros 40 en el extranjero), mantiene negociaciones con varios grupos inversores interesados, tal y como confirmó la sociedad durante su última junta general de accionistas, celebrada en junio. La intención de la compañía asturiana es materializar la entrada de uno o varios accionistas mediante una ampliación de capital. Aunque el propósito inicial era dejar resuelta la operación antes de que finalizara el ejercicio, en los últimos meses ya se dejó abierta la posibilidad de que se demorase al próximo trimestre. La ampliación de capital requerirá a su vez la convocatoria previa de una junta general extraordinaria de accionistas que autorice la operación y apruebe la renuncia al derecho preferente de suscripción de los nuevos títulos por parte de los accionistas actuales con el fin de que la emisión pueda ser cubierta por los nuevos socios.

La captación de inversores tiene por finalidad reforzar la estructura de capital y la fortaleza de la compañía, además de dotar al grupo de uno o varios accionistas de referencia, fundamentalmente de naturaleza industrial, de los que ahora carece.

El ERE recientemente pactado se ha interpretado como un paso para facilitar la operación de entrada de los nuevos socios. Duro fue objeto de un rescate temporal de 120 millones por el Gobierno central y de 6 millones por el Principado mediante préstamos participativos que deberán ser devueltos. La compañía ya está pagando con puntualidad los intereses: 150.000 euros anuales el Principado y unos 3 millones a la SEPI.

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