La patronal asturiana asegura que la subida del salario mínimo es "dañina" para las empresas de la región

María Calvo (FADE) advierte de que las pymes "no pueden trasladar el aumento de costes a sus precios finales"

Yago González

Yago González

La presidenta de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), María Calvo, ha asegurado este miércoles que la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) a 1.080 euros, anunciada ayer por el Gobierno, es "dañina" para las empresas de Asturias, dado que "puede comprometer su situación" porque "muchas están pasando ya por una situación muy complicada y no pueden trasladar el aumento de sus costes a los precios finales, puesto que muchas familias están sufriendo por la inflación".

"Acumulamos varias subidas importantísimas del SMI en los últimos años. Entendemos la situación de las familias y los trabajadores, pero la prioridad debe ser mantener el tejido empresarial y el empleo", ha advertido Calvo durante la inauguración de Asturex Open Days, jornadas sobre internacionalización que se celebran hoy y mañana en el Palacio de Congresos de Oviedo.

El Ejecutivo proclamó ayer el incremento del salario mínimo después de una reunión entre la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y los sindicatos CCOO y UGT. Al encuentro no acudió el líder de CEOE, Antonio Garamendi, al considerar que el Gobierno no ha escuchado sus propuestas. Este plantón, además, se produce pocos días después de que la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, criticara a los empresarios del sector distribuidor por lucrarse, a su juicio, del aumento de precios de alimentos. Estas palabras provocaron una condena contundente por parte de la patronal.

"Estamos en un momento complicado, quizá algunos partidos y sectores del Gobierno no tienen en suficiente consideración al mundo empresarial", ha reprochado Calvo. "Tenemos que defendernos de estos ataques injustificados, son las empresas las que generan empleo y riqueza y ayudan a mantener el estado de bienestar", ha remarcado. "El diálogo debe ser efectivo, pero un diálogo de verdad en el que se escuche a las empresas", ha instado.

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