El plan de la mayor fábrica de hidrógeno verde de Asturias

EDP llevará el hidrógeno de Aboño por unas nuevas tuberías hasta DuPont

El aprovechamiento de infraestructuras de la central térmica, en especial del grupo 1 que va a cerrar, permitirán agilizar el proyecto, optimizar costes y reducir el impacto ambiental

Central de Aboño

Central de Aboño / Marcos León

La construcción y puesta en servicio de la primera fase del proyecto "Asturias H2 Valley", a la que EDP destinará 244,41 millones de euros, IVA incluido, para instalar 150 megavatios de electrolizadores para producir hidrógeno verde, tal como adelantó ayer LA NUEVA ESPAÑA, llevarán aparejadas otras inversiones, como la construcción de conducciones de gases y agua, además de plantas de energía renovable. EDP prevé suministrar el hidrógeno de Aboño a través de hidroductos hacia sus clientes industriales, inicialmente la planta química de DuPont en el valle de Tamón y la cementera del grupo Masaveu en Aboño, a la que también surtirá de oxígeno a través de un oxiducto. El proyecto también prevé que una parte del hidrógeno se emplee como combustible del grupo 2 de la térmica de Aboño.

Además, EDP está tratando con el Principado sobre la construcción de una tubería dedicada a transportar agua tratada en la depuradora de Villapérez (Oviedo) hasta Aboño, para usarla en la electrólisis. No son las únicas inversiones colaterales que se vinculan a este proyecto. EDP contempla la instalación de entre 200 y 300 megavatios de potencia de energías renovables, incluyendo una central silar fotovoltaica también en sus instalaciones de Aboño, ya anunciada anteriormente por la compañía.

Además de la fotovoltaica, la energía que surtirá los 185 megavatios de potencia previstos para la instalación (incluyendo la necesaria para las instalaciones auxiliares) procederá de aerogeneradores terrestres y de hidrotornillos. El proyecto sólo prevé la conexión directa a una instalación, la granja solar prevista en Aboño, adquiriendo el resto de la electricidad de la red con certificado de origen renovable, que llegará a través de la subestación de Carrió, a 400 metros.

El proyecto aprovecha las infraestructuras existentes del grupo 1 de la térmica de carbón de Aboño (entre otras cosas usará su toma de agua de refrigeración de El Musel). El grupo 1, que tiene restringida su operación a un máximo de 500 horas al año, está previsto que cierre. La reutilización de parte de las infraestructuras que ya existen permitirá optimizar los costes y plazos de ejecución del proyecto; simplificar los trámites administrativos y permisos, y disminuir notablemente los impactos ambientales .

Esta primera fase del proyecto se implantará sobre 26.000 metros cuadrados –junto a la cantera de Aboño– del total de 120.000 metros que ocupan las instalaciones de la térmica. Entrará en explotación de forma escalonada entre octubre de 2025 y marzo de 2026. Se prevé que tenga 8.307 horas de funcionamiento al año (7.100 horas de funcionamiento equivalente a carga máxima).

Está prevista una segunda fase, con otros 350 megavatios de electrolizadores en Aboño que estarían operativos en 2030.

El proyecto de EDP se desarrolla en terrenos de Gijón y Carreño, a través de su filial H2 Aboño. La empresa ya ha comenzado la tramitación ambiental y tiene pendiente el desarrollo de la ingeniería de detalle. La compra de equipos, que se llevarán el 74% del presupuesto, comenzará en septiembre y el inicio de las obras se prevé para junio de 2024, con una duración de 17 meses. La vida útil de las instalaciones se estima en 30 años y generarán empleo en dos municipios incluidos dentro de las zonas de Transición Justa.

La planta será operada de manera automática, usando un algoritmo que gestionará la producción de hidrógeno en función de la disposición de energía renovable y la demanda de los compradores industriales, controlando el stock almacenado. El sistema de control tratará de minimizar la reducción de electricidad procedente de energías renovables, maximizar la producción de hidrógeno, minimizar el coste nivelado de hidrógeno (variable que indica lo que cuesta producir un kilo de hidrógeno verde) y participar en el mercado de servicios auxiliares a través de la operación de respuesta a la demanda.

La obra civil necesaria para el proyecto será mínima. Básicamente la construcción de una subestación eléctrica para reducir el voltaje y edificios modulares para los equipos de producción y para instalaciones auxiliares como compresores de los gases, plantas de tratamiento de agua y tanques de almacenamiento.

La hidrogenera

La tecnología inicialmente prevista –que puede variar en base a los avances que se produzcan en este campo– prevé que los gases se generen a presión atmosférica. Se instalarán compresores para suministrar el hidrógeno y oxígeno a los clientes industriales, inyectar el hidrógeno a la red, transportarlo en vehículos o para la hidrogenera que también prevé el proyecto, con capacidad para suministrar ese combustible a 20 camiones o autobuses y a 50 vehículos ligeros al día. Esta estación de repostaje de hidrógeno para vehículos pesados y ligeros será desmontable para su posible traslado en el futuro a una zona más próxima a los consumidores.

Las ayudas

EDP ya tiene asegurada una ayuda pública de casi 30 millones de euros para poner en marcha la planta hidrógeno verde de Aboño tras incrementarse las partidas que recibirá del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) de Energías Renovables. Además, la compañía está a la espera de que se ratifique la ayuda europea que recibirá tras incluirse "Asturias H2 Valley" dentro de los Proyectos Importantes de Interés Común Europeo (IPCEI por sus siglas en inglés) y que será el principal impulso económico del proyecto. El Ministerio para la Transición Ecológica, a través del PERTE de Energías Renovables, había aprobado inicialmente una ayuda de 14,2 millones de euros para la planta de Aboño dentro de la línea de proyectos pioneros y singulares de hidrógeno renovable, y otros 15 millones en la línea de grandes demostradores de electrólisis. Sin embargo, una vez resuelto el periodo de alegaciones, la ayuda definitiva de la primera línea se ha elevado a casi 14,9 millones. También se ha incrementado la subvención para la planta de EDP en Soto de Ribera hasta 6 millones de euros.

El plan de Corporación Masaveu

El proyecto "Asturias H2 Valley" con el que EDP producirá hidrógeno verde en Aboño suministrará de gas renovable a la fábrica de Cementos Tudela Veguín situada en sus inmediaciones, según indicaron fuentes de la Corporación Masaveu, a la que pertenece la compañía. El plan de la empresa cementera es "sustituir progresivamente el consumo de combustibles fósiles por el de hidrógeno verde", a medida que H2 Aboño, filial de EDP, avance en el desarrollo de los electrolizadores. Además, la previsión es que la planta cementera de Tudela Veguín en la localidad que le da nombre, en el concejo de Oviedo, reciba también suministro de hidrógeno verde pero procedente del proyecto, de menor tamaño, que contempla EDP en la central de Soto de Ribera. La razón es la proximidad geográfica, que simplificará la logística del transporte del gas. Cementos Tudela Veguín y EDP también colaboran desde verano de 2020 en el despliegue de una planta fotovoltaica de autoconsumo en la fábrica de la primera en La Robla (León). La potencia prevista es de 3 megavatios pico (MWp).

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