‘Time Out’ elige cinco ciudades de España en su lista

España es la gran triunfadora en la influyente lista de "Las 50 mejores ciudades del mundo en 2025", elaborada anualmente por la revista Time Out, una publicación especializada en el ocio urbano. Hasta cinco capitales españolas figuran en la selecta relación, por encima de las cuatro estadounidenses y de las tres británicas.

Barcelona (17), Sevilla (18), Madrid (22), Valencia (43) y Bilbao (45) componen la alineación española destacada por Time Out. La guía ha valorado especialmente la opinión de los residentes en las diferentes ciudades, antes de calificarlas como las más "excitantes" del año en curso. El objetivo final es el destino viajero, en el apartado de "Visítala ahora porque...".

La exclusión de Palma se produce al cumplirse la primera década de su proclamación como "La mejor ciudad del mundo para vivir", según el Sunday Times. Esta calificación era tan rotunda que el dominical británico titulaba en 2015 su información como "Palma derrota al planeta", con una atractiva imagen de las desiertas escalinatas que desembocan en el palacio de la Audiencia.

El peso específico de Palma, solo superada en imagen global por Ibiza en el ámbito español, concede una significación especial a la exclusión de ambas. Madrid y Barcelona suponen designaciones tópicas, las dos figuran también entre las diez mejores del mundo para Euromonitor, si bien la capital desciende de la posición cinco a la 22 y se queda por detrás de su rival catalana. La pérdida de la supremacía mallorquina se centra por tanto en la emergencia de Sevilla, Bilbao o Valencia. El único consuelo en la competición regional es que también Málaga, rival tradicional de los palmesanos, ha quedado fuera de la lista de Time Out.

"Los valencianos saben como vivir" encabeza la consideración de la capital levantina en la lista, sin omitir la componente solidaria de un viaje tras "las inundaciones de octubre". Al norte, "el alma definitivamente vasca de Bilbao es la razón para visitarla". En ambos destinos, se resaltan detalles orientativos como el precio asequible de las consumiciones. El alcalde Jaime Martínez hizo campaña bajo el lema de que Palma recuperaría su rango de "mejor ciudad del mundo para vivir". De momento, ha perdido el título a escala española, aunque este destierro puede contribuir a rebajar la saturación.

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