El líder de los socialistas asturianos, Adrián Barbón, junto a la ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, y la secretaria de organización de la FSA, Gimena Llamedo, visitaron en la mañana de ayer la sede de la Asociación de Personas con Discapacidad Intelectual Emburria, en Cangas de Onís. Los socialistas reivindicaron los derechos del colectivo de discapacitados y aseguraron que desde el gobierno central impulsarán la plena inclusión de estas personas en la sociedad para que puedan demostrar todo su potencial. Las alusiones al acto de Vox el viernes en Covadonga estuvieron muy presentes. "A mí la reconquista que me gusta es la de los derechos, la de aumentar el salario mínimo, las pensiones y las ayudas a parados de larga duración", subrayó el candidato a la presidencia del Principado.

"Mientras algunos se pegan por las banderas nosotros hablamos de las personas y de sus problemas", señaló Adrián Barbón, quien dijo estar "emocionado" tras ver en primera persona el trabajo que el colectivo Emburria lleva a cabo en Cangas de Onís.

"Lo que estamos viendo nos preocupa. Estamos ante una amenaza de involución", añadió en referencia al discurso de Vox. Para Barbón las elecciones generales del próximo del 28 de abril serán una lucha entre "las derechas y los derechos". Éste pidió la máxima movilización de la izquierda para frenar "a las tres derechas", y que el voto de todos los progresistas y también de los moderados, se deposite en la urna del PSOE.

María Luisa Carcedo, candidata al Congreso por Asturias, abogó por trabajar en la construcción de "mecanismos suficientes" para activar las potencialidades de los discapacitados "y permitir su inclusión plena en la sociedad". Incrementar la atención temprana dentro de un diagnostico precoz lo tildó de fundamental para empezar cuanto antes a trabajar con las personas de este colectivo. "Muchas de estas cuestiones se lograron estos meses desde el gobierno y otras se impulsarán en la próxima legislatura. Son políticas a las que el PSOE no renunciará jamás", manifestó.