La decisión de la Junta Electoral Central (JEC) de prohibir a Vox participar en el debate a cinco previsto para el próximo martes, día 23, en Atresmedia ha desencadenado una espiral de desacuerdos que incluso hace dudar que llegue a celebrarse debate alguno entre primeros espadas. La situación explotó ayer al anunciar RTVE el traslado al martes de su previsto debate a cuatro del lunes. RTVE se alinea así con la voluntad expresada anteayer por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de debatir ese día y en ese lugar.

Sánchez se enrocó ayer en su intención de debatir con los líderes de PP, Unidas Podemos y Cs el martes en RTVE. Oficialmente, esta decisión se basa en que el ente público emitirá la señal en abierto para que aquellos medios de comunicación que lo deseen puedan programarlo también, garantizando que el combate dialéctico tenga "la mayor difusión y audiencia posibles".

Sin embargo, los líderes opositores se han negado a plegarse a los designios de Sánchez y mantienen su voluntad de acudir el martes a Atresmedia, ante lo que el Presidente aseguró que no tiene inconveniente en debatir ese día en RTVE con subalternos.

El primero en pronunciarse fue el PP, formación que recordó cómo RTVE les había invitado a un debate a cuatro el lunes, día 22, fecha en la que, aseguraron los populares, no tienen problema en acudir. El líder del PP, Pablo Casado, advirtió que no está dispuesto a someterse a un "trágala al dictado" de Sánchez, al que acusó de "instrumentalizar" el debate.

Acto seguido intervino el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, quien consideró que RTVE ha hecho coincidir su debate con el de Atresmedia debido a "una llamada de Moncloa". Para Iglesias esa orden nace de la negativa de Sánchez a mantener dos debates con los líderes de la oposición. El cabeza de filas morado advirtió que RTVE "no puede ser el instrumento partidista de ningún Gobierno" y exigió a la administradora única provisional del ente, Rosa María Mateos, que proponga otra fecha.

Poco después llegó la respuesta del presidente de Cs, Albert Rivera, quien adelantó que acudirá al debate de Atresmedia y acusó a Sánchez de "querer esconderse de los españoles y no hacer debates", lo que calificó de "escándalo".

La situación rizó el rizo de la complejidad cuando los consejos de informativos de TVE, RNE y RTVE.es expresaron su disconformidad con la decisión de trasladar el debate al martes. El periodista Xabier Fortes, elegido por RTVE para conducir la confrontación de líderes, tuiteó su desacuerdo con el cambio de fecha, que, en su opinión, pone "en entredicho la imagen de independencia de RTVE por la que tanto", dijo, han "peleado" sus trabajadores.