El economista Segundo González (Pola de Allande, 1988) fue diputado en el Congreso entre 2015 y 2019 de Podemos, formación de la que se ha distanciado antes de dar el paso para poner cara en Asturias al nuevo partido de Íñigo Errejón, Más País, del que es cabeza de lista en la candidatura al Congreso.
- ¿Cómo va la campaña electoral? ¿Es muy distinta a otras anteriores en las que participó?
-Muy distinta porque nadie quería esta campaña. Llega por el fracaso que supone no alcanzar acuerdos para que haya un Gobierno progresista, despreciando la mayoría que salió de las urnas en las elecciones de abril. Más País somos el único ingrediente nuevo para desbloquear esta situación política.
- ¿Hay riesgo de que la derecha sume más ante esta repetición electoral?
-El riesgo existe y pone en evidencia la irresponsabilidad que entraña no haber alcanzado el acuerdo para un Gobierno progresista. Por eso nos ofrecemos como una nueva alternativa, capaz de propiciar entendimiento y diálogo para que la gente no se quede en casa ante la enorme desafección y descontento que provoca esta repetición electoral y canalizar esa abstención en voto progresista.
- ¿Cómo valoran unas encuesta que en Asturias no le das opción de escaño?
-Las encuestas siempre miden mal las nuevas opciones políticas. A Íñigo Errejón le daban en Madrid un 7 por ciento y luego sacó un 15, tampoco anduvieron finas con Vox en Andalucía ni en las elecciones europeas de 2015 cuando no preveían ningún escaño para Podemos y se sacaron cinco. La mejor encuesta es la gran acogida que percibimos a pie de calle y e incluso en la gente que dice que ya nos ha votado por correo.
- ¿Cuáles son los principales atractivos de la oferta de Más País?
-Defendemos una apuesta decidida por las políticas públicas, que debe ir acompañada de medidas como la derogación de la actual reforma laboral, que por ejemplo, ha provocado la deslocalización de Vesuvius; la subida de las pensiones conforme al IPC y el cambio de modelo productivo que en Asturias ha de llevar parejo una importante inversión pública para que no sigan marchando jóvenes, más de 15.000 en los últimos años. Es necesario priorizar el interés general de los ciudadanos sobre el interés de los partidos. Nuestra vocación es romper el inmovilismo existente en el escenario político actual para facilitar la formación de un Gobierno progresista y estable y no vernos abocados a unas terceras elecciones.
- Vistalegre II pidió unidad. ¿Por qué no fue posible?
-Eso hay que preguntarlo a quien no gestionó de manera adecuada los resultados de Vistalegre II. Más País representa un proyecto diferente, que nace para dar una respuesta ante la desafección existente . En este país no nos podemos permitir pactos de la derecha, ya hemos visto el resultado de sus políticas.
- La próxima legislatura, si finalmente tiene recorrido, será determinante para las políticas de transición energética y para la reforma del sistema de financiación autonómica. ¿Es el último tren para la Asturias del siglo XXI?
-Ya se perdió mucho tiempo. La canción de Víctor Manuel dice que Asturias se le jugó dos veces y esta es la tercera, por eso es tan importante que Asturias cuente con voz propia en el Congreso. El modelo de transición energética de Pedro Sánchez y de Teresa Ribera no cumple las condiciones de una transición justa, que pasa por generar un tejido productivo alternativo capaz de mantener el empleo donde se pierde.
- ¿Le preocupa un avance electoral de Vox?
-Es una vergüenza que no se esté contestando el discurso tóxico y falso de Vox en esta campaña, un partido que pretende privatizar las pensiones, cuyas cuentas no cuadran en absoluto y que en Asturias está encabezado por un familiar de Rodrigo Rato. Da bastante miedo poner la economía del país en manos de esta gente. Espero que la gente se de cuenta y el 10N salga a votar a opciones progresistas y especialmente a la única que garantiza que el resultado sea diferente, a Más País.
