Madrid

El Gobierno español y diversas organizaciones desarrollan intensas gestiones para lograr la liberación de los tripulantes del pesquero español «Playa de Bakio», secuestrado el domingo frente a la costa de Somalia. Así, la fragata «Méndez Núñez», el mejor y más moderno buque de la Armada, puso rumbo ayer desde el mar Rojo a la zona del incidente para auxiliar al pesquero. Las autoridades españolas calculan que la nave llegará a la zona dentro de las próximas 48 horas.

El barco atunero español «Playa de Bakio», con 26 tripulantes -trece españoles y trece africanos, de los cuales ocho son gallegos y cinco vascos-, fue abordado y secuestrado por un grupo de piratas a 250 millas de la costa de Somalia, presuntamente para lograr dinero a cambio.

Amadeo Álvarez, uno de los tripulantes, dijo ayer a su esposa que se encuentra bien y que no hay heridos en el buque, según confirmó a «Efe» la hija del marinero, Rosa María, que dijo que las familias de los rehenes están «bastante angustiadas». También dijo que los piratas están forzando a la embarcación a trasladarse hacia la población de Obbia, a mitad de camino entre Bareda y la capital somalí, Mogadiscio.

La Embajada de España en Kenia, que también representa los intereses españoles en Somalia, esta realizando gestiones con autoridades locales para tratar de poner fin al secuestro del pesquero.

Representantes de un consejo de ancianos de Somalia también están intentando mediar en el secuestro, según dijo desde Kenia Andrew Mwangura, director del Programa de Asistencia a Navíos del este de África, una entidad que sigue de cerca los numerosos actos de pirateo que se producen en las costas de Somalia. En la mayoría de los casos estos secuestros tienen un móvil económico, y en muchos de ellos son representantes de los consejos de ancianos, muy respetados en Somalia, los que median entre las partes.

El Gobierno español ha creado una célula de seguimiento e información en el Estado Mayor de la Defensa para lograr la rápida liberación de los tripulantes. Además, realiza intensas gestiones con organismos y con países aliados que tienen presencia militar en la zona. Militares españoles y de la OTAN permanecen en contacto permanente para intercambiar información, informó un portavoz de la Alianza, que añadió que ésta no ha recibido por ahora ninguna petición para organizar una operación de rescate.