Santiago del Monte (Castrillón)

Los restos mortales de Calvo- Sotelo fueron recibidos ayer con honores militares en el aeropuerto asturiano, la última parada antes de recalar en su destino definitivo: la localidad lucense de Ribadeo. A la una de la tarde tomó tierra en la pista de Santiago del Monte el avión de las Fuerzas Armadas, procedente de Torrejón de Ardoz (Madrid) con el féretro del ex presidente del Gobierno y sus familiares, entre los que se encontraba la ministra de Educación y Servicios Sociales, Mercedes Cabrera, sobrina de Calvo-Sotelo, que fue la primera en desembarcar de la aeronave.

A pie de pista les recibió un cordón de honor formado por unos cuarenta militares del Ejército del Aire de la base aérea de la Virgen del Camino y del Regimiento «Príncipe» de Asturias. El féretro fue trasladado a hombros por agentes de la Guardia Civil hasta el coche fúnebre en un solemne acto en el que estuvieron presentes el delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín, y otras autoridades policiales y de la Guardia Civil.

No sólo altos cargos se dieron cita en el aeródromo asturiano para recibir los restos mortales de Calvo-Sotelo. Fueron muchos los curiosos que no quisieron perderse la llegada a Asturias del féretro del que fuera presidente del Gobierno, el primero de la reciente historia de la democracia fallecido, y que aguardaron durante horas el aterrizaje del avión procedente de la base aérea militar de Torrejón de Ardoz.

Tras los honores militares, la comitiva fúnebre (compuesta por más de una decena de coches y varios autocares) partió, por carretera, hacia la localidad lucense de Ribadeo.