Madrid

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha querido contrarrestar las fuerzas centrífugas que mueven a los socialistas catalanes y ha pedido a todos los miembros de su familia política que trabajen juntos, ya que, dijo, «ante todo nos unen ideales y principios» y «somos compañeros hayamos nacido donde hayamos nacido».

Las declaraciones de Zapatero se producen después de que, el domingo, el presidente de la Generalitat y primer secretario de los socialistas catalanes (PSC), José Montilla, anunciase que renunciará a seguir formando parte de la ejecutiva socialista después del próximo congreso, que se celebrará en junio.

El PSC todavía no ha decidido quién sucederá a Montilla -muy absorbido por sus funciones al frente del Gobierno catalán- ni siquiera si habrá representantes del PSC en la próxima ejecutiva socialista. El PSC no es una federación territorial del PSOE, sino un partido autónomo federado con él.

Entre tanto, el secretario de organización del PSOE, José Blanco, aseguró que el 37.º congreso del partido, que se celebrará entre el 4 y el 6 de julio, abordará «lo importante, los problemas de la sociedad española y de su futuro», a diferencia del cónclave del PP, que se ocupará de sus propios problemas internos.

Así comparó Blanco los dos congresos en rueda de prensa tras la reunión de la comisión ejecutiva del partido, que ayer aprobó la ponencia marco para su cónclave, que será remitida a todos los miembros del partido para que hagan sus aportaciones y enmiendas antes del congreso. «No queremos anquilosarnos en el Gobierno para que los ciudadanos nos envíen a renovarnos a la oposición; queremos renovar nuestras ideas y proyectos mientras gobernamos, queremos cambiar a la misma velocidad que cambia la sociedad española, y a ello responde el documento», explicó.

El texto aprobado recoge las ideas básicas tanto del programa electoral socialista como del discurso de investidura de Zapatero, y hace hincapié en el modelo de crecimiento económico sostenible, el cambio climático, las políticas de igualdad, convivencia e integración, y el diálogo social como seña de identidad de la política democrática.

Uno de los aspectos más relevantes de la ponencia es la voluntad del PSOE de reforzar su estructura a nivel local, sobre todo en las grandes ciudades donde el PP ha consolidado «posiciones hegemónicas». Para ello, en las ciudades de más de 250.000 habitantes o en aquellas que, con más de 175.000, sean capitales de provincia o ciudades singulares, reforzará sus agrupaciones municipales con órganos como el congreso municipal, el comité municipal y la comisión ejecutiva municipal.

Zapatero comparecerá hoy en la primera sesión plenaria del Senado, iniciativa que ya adoptó hace cuatro años para presentar su proyecto político. Fue Felipe González el primer jefe del Ejecutivo en acudir al Senado, en 1982 y 1986, una costumbre que no siguió en posteriores legislaturas y que tampoco reanudó su sucesor, José María Aznar.