Madrid

Seis personas, incluyendo al guardia civil Juan Manuel Piñuel Villalón, han muerto en los 22 atentados cometidos por ETA desde el 30 de diciembre de 2006, cuando la banda terrorista rompió una tregua de nueves meses al hacer estallar un coche bomba en un aparcamiento de la T-4 del aeropuerto madrileño de Barajas.

Al atentado de la T-4 siguieron otros ocho en 2007 y trece en lo que va de 2008, en los que han muerto otras cuatro personas y once han sufrido heridas. Además de estas acciones terroristas, ETA intentó atentar en otras tres ocasiones, aunque no lo consiguió.

Piñuel Villalón es la segunda víctima mortal de ETA en el año 2008 y la primera en esta legislatura. De los trece atentados terroristas perpetrados desde que comenzó el año, en siete, como el de hoy, ETA no ha avisado y en el resto sí lo hizo, aunque en uno de ellos el aviso llegó tarde.

La banda terrorista ha asesinado a 834 personas desde 1968, de los que 204 eran guardias civiles. Las dependencias de la Guardia Civil, fundamentalmente cuarteles y casas cuartel, han sido uno de los objetivos habituales de las acciones de ETA, que en sus 77 atentados contra estas instalaciones desde 1979 ha causado 33 muertos y más de 240 heridos.

Los métodos más utilizados por los terroristas han sido el lanzamiento de granadas, los ametrallamientos y los coches bomba.