Madrid / Oviedo

José Blanco «ejerció» ayer en el Congreso como vicepresidente en una dura sesión de control al Gobierno, mientras el PP le exigía a Manuel Chaves que se fuera. El ministro de Fomento pidió a los populares que hagan «patriotismo del bueno» y no «patriotismo de pacotilla» apoyando el decreto ley con las medidas de ajuste del Gobierno.

«No hagan oídos sordos, porque eso es lo que le conviene a España y no difundir sospechas que no se corresponden con nada cierto», dijo durante la sesión de control en el Congreso. Sus palabras alborotaron la bancada popular, hasta el punto de que fue necesaria la intervención de José Bono para poner orden.

El vicepresidente Manuel Chaves aseguró, por su parte, que los ciudadanos se preguntan «para qué sirve» un partido como el PP, que, a su juicio, «no propone nada serio» y además «piensa únicamente en clave electoral» y acusó a los «populares» de proponer medidas «ridículas» para afrontar la crisis económica y reducir el déficit público.

Chaves rechazó así de nuevo las críticas del PP al papel de su vicepresidencia y recordó que la estructura del Ejecutivo es competencia exclusiva del presidente del Gobierno. «La estructura del Gobierno la fija quien gana las elecciones y no quien las pierde, y ustedes las perdieron», recordó el Ministro a los «populares». Las atribuciones asignadas a la Vicepresidencia Tercera volvieron al Pleno del Congreso de la mano del diputado del PP Juan Manuel Moreno, quien, ante un hemiciclo con sólo la mitad de los escaños ocupados, criticó el «lujo» de mantener tres vicepresidencias.