El presidente de la Comisión de Presupuestos del Congreso y ex vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, se mostró ayer partidario de desclasificar los documentos sobre la intentona golpista del 23 de febrero de 1981, especialmente las conversaciones telefónicas.

Así lo dijo al ser preguntado por la decisión de IU de pedir al Gobierno que los desclasifiquen tras publicar un telegrama del que fuera embajador de Alemania en 1981 asegurando que la actuación del Rey ante el golpe fue «poco transparente», y de una supuesta simpatía hacia los golpistas.

A Guerra le interesaría encontrar sobre todo las cintas magnetofónicas sobre las conversaciones telefónicas que se realizaron esa jornada. «Ya sé que han negado que existieran, pero sí existieron», zanjó.

El portavoz del Grupo Popular, Alfonso Alonso, defendió al Rey. «Todo el mundo sabe lo que pasó el 23-F y el papel que tuvieron unos y otros, muy significativamente la Corona como garante de nuestras libertades y de la democracia».