La profunda crisis que vive España ha provocado que muchos españoles hayan tenido que salir fuera a buscar nuevas oportunidades laborales y que los inmigrantes tengan que recibir ayudas desde sus lugares de origen, lo que propicia un alza de las remesas enviadas al país, convertido en un gran receptor.

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), en el primer trimestre, 132.535 personas, de las que 27.004 eran españolas y 105.531 extranjeras, abandonaron el país. Por el contrario, 101.184 personas (8.751 españolas y 92.433 extranjeras) vinieron, con lo que el saldo migratorio fue negativo en 31.351 personas.

Esta «salida» de ciudadanos desde España a otros países como consecuencia de la crisis ha propiciado un incremento de las remesas enviadas a España, que según la compañía de transferencias internacionales de dinero Ria Financial, habría registrado un alza del 58 %.

Alemania, Suiza, Francia y Reino Unido son los países desde donde se ha enviado más dinero a España. Este dato pondría de manifiesto que éstos son los lugares donde se concentra la mayor parte de españoles que han salido a trabajar fuera. El envío medio de dinero de un español que está en el extranjero es de unos 300 euros. El perfil medio del español que envía dinero es el de un joven, muy cualificado, de buen nivel familiar, «que nunca pensó que tendría que salir al extranjero».

Por su parte, el PSOE pide medidas ante el aumento de la pobreza y la exclusión, entre ellas extender la ayuda a los parados de larga duración que han agotado las prestaciones.