La policía ha detenido esta tarde junto a una parroquia de Entrevias, en Madrid, a Alfonso F.O, conocido como Alfon, el joven condenado a cuatro años de prisión por portar explosivos durante una huelga general en 2012.

La detención se ha producido hacia las 21.30 horas de esta tarde junto a la parroquia de San Carlos Borromeo del barrio madrileño de de Entrevias.

El Tribunal Supremo había confirmado la condena de cuatro años de cárcel contra el joven, al considerar que los artefactos caseros explosivos que llevaba en la jornada de huelga, el 14 de noviembre de 2012, podrían haber causado daños.

Tras la decisión del Supremo, la Audiencia Provincial de Madrid ordenó su detención e ingresó en prisión para cumplir la pena impuesta, lo que ha motivado la detención a ultimas horas de esta tarde.

Según su abogado, Erlantz Ibarrondo, el joven había remitido un escrito a la Audiencia Provincial en la que comunicaba su deseo de entregarse.

"Estoy en la parroquia de San Carlos Borromeo y pido que acudan las fuerzas de seguridad a detenerme", rezaba el escrito según el letrado.

Un grupo de personas se concentró junto a Alfonso F.O poco antes de la detención para formar un "muro" que aislara al detenido ante la actuación policial, del modo en que ha ocurrido en ocasiones en el País Vasco.

Mochila con una bomba casera

La detención se ha producido después de que, en una audiencia cerrada, los magistrados del Tribunal Supremo confirmaran hoy la condena de cuatro años a Alfon al considerarse probado que durante la jornada de huelga del 14 de noviembre de 2012 llevaba una mochila con un artefacto explosivo casero.

Los magistrados de la Sección 30 condenaron a Alfon "por las características especialmente peligrosas del artefacto", que según destaca era de carácter mixto -explosivo e incendiario-, llevaba incorporados "gases extremadamente inflamables" y contenía tornillos a modo de metralla "susceptibles de causar daños a la personas".

La sentencia considera probado que el 14 de noviembre de 2012, día de huelga general convocada por los sindicatos CCOO y UGT, el condenado se encontraba en las proximidades de la avenida de Buenos Aires de Madrid junto a otros dos jóvenes y portaba una bolsa que tiró al suelo cuando unos agentes de paisano se acercaron.

En la bolsa, según se comprobó después, había dos botellas de plástico con gasolina y dos botes de metal, denominados butane-gas, que contenían un gas licuado extremadamente inflamable. Todo ello atado con una cinta y en el centro un petardo con una mecha a la que se habían unido varias cerillas.

Alfon ya fue condenado el pasado diciembre a un año de prisión por un delito de lesiones y otro de resistencia a la autoridad, si bien fue absuelto del delito de atentado contra agente de la autoridad.