Rodrigo Rato, que se encuentra pasando unos días de descanso en Gijón, aprovechó ayer la mañana para darse un baño en la piscina del Club de Regatas, del que es socio. Casi a la misma hora en que el ministro de Interior comparecía en el Congreso para explicar la reunión que mantuvo con el ex presidente de Bankia, Rato se daba un chapuzón, ajeno a la polémica desatada.
Ayer por la mañana, en la iglesia de San Pedro, estaba anunciada una misa en sufragio por Ramón Rato, padre del ex vicepresidente del Gobierno con Aznar; pero ningún miembro de la familia estuvo presente en la celebración religiosa, recogida desde el pasado domingo en el programa de cultos del templo parroquial.
El pasado lunes, Rodrigo Rato, acompañado de su actual pareja, Alicia González, estuvo comiendo en el restaurante Casa Koty, en Quintueles, a donde llegó en una Vespa. Anteanoche cenó en Casa Kilo, en Quintes, en compañía de su novia y de su hermana. Para esta semana estaba prevista también una reunión familiar en Gijón de los Rato y Figaredo.
